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Distintos modelos

Serena Williams tiene algo comparable con Federer: el espíritu de campeona. Lejos de la continuidad y la voracidad de gloria del rey masculino, habiendo jugado sólo cuatro torneos en la temporada anterior, tambien impone supremacia mental.

Aunque haya dicho que muchos la tratan de gorda sólo porque "no tengo cola y pechos lisos", está claro que dio ventajas en sus desplazamientos. No obstante, se fue afinando en lo tenístico y físico con el correr de la competencia y logró que el cuadro femenino no tuviera final.

Maria Sharapova tuvo su porcentaje más bajo de primeros saques en Majors y lo pagó caro, con una paliza en una 1 hora y 3 minutos.

Toda la fortaleza y la integridad que le sobró a la numero 81° del mundo para producir un enorme comeback, le faltó al PADRE Y ENTRENADOR de la rusa. Yuri, que da el perfil de malvado para una pelicula de Austin Powers (no le alcanza para una de James Bond), vio el encuentro cumbre entre perplejo y enojado porque Maria era avasallada.

Apenas concluido el partido, dejó el palco, fue hasta la puerta del restaurant de jugadores y se quedó caminando nerviosamente por allí, abriendo y cerrando la tapita de su celular, espiando un televisor que mostraba cómo preparaban el court principal para la ceremonia de premiación.

Jugueteaba con una botella de agua mineral hasta que arrojó parte de su contenido al piso y terminó la patética escena eligiendo la puerta incorrecta para salir al exterior... en consecuencia, chocó su cara con el vidrio antes de abrir la adecuada para ingresar al jardín... Al mismo tiempo su HIJA Y PUPILA, quien había perdido simplemente un partido de tenis que, por supuesto, quería ganar, empezaba su discurso...