Con respecto al mal manejo de la pelea del sábado entre Humberto Soto y Francisco Lorenzo por parte del árbitro Joe Cortez: No se mostró justo ni firme.
Soto, quien fue descalificado en el cuarto round por aterrizar un golpe tras que Lorenzo hubiera sido derribado por segunda vez, fue quitado de una victoria nocaut, lisa y simple. Miré la transmisión por HBO cuando llegué a casa de la pelea y tengo que decir, conozco al presentador de HBO Emanuel Steward hace mucho tiempo y nunca lo ví tan enojado como con la decisión de descalificar a Cortez. Se podía sentir la furia de Steward a través de la TV. Es más o menos la manera de cómo me sentí al costado del ring. Fue una injusticia total. Soto no debiera darle una revancha a Lorenzo. ¿Cuál es el punto?
Hablando de Soto, nunca pensé que escribiría esto, así que siéntense y tranquilícense: Estoy de acuerdo con una reglamentación del CMB. Si, aparentemente los cerdos están volando. Si, el infierno quizás se cubrió de hielo. Pero estoy de acuerdo con la banda de José Sulaiman, que se negó a premiar a Lorenzo con el título interino de ligeros junior que supuestamente iba a ser disputado en la pelea. Con la victoria de Manny Pacquiao por el título de ligeros contra David Díaz, permanecerá en la categoría de ligeros, con lo que el ganador de la pelea Soto-Lorenzo debía ser galardonado con el título de las 130 libras del CMB.
Pero a causa de la absurda y ridícula decisión de Cortez, una apoyada por los oficiales de la comisión de Nevada, el CMB no premió a Lorenzo con el título, optando por dejarlo vacante. Estoy de acuerdo. No se le da el título a un boxeador ensangrentado y golpeado, que en mi opinión, estaba fingiendo haber sido herido por el golpe de Soto mientras estaba sobre la lona. Fue un golpe que a mi modo de ver no fue intencional. Debiera haber sido un TKO para Soto.
Creo que los conductores de HBO Jim Lampley y Steward hicieron un muy buen trabajo en la transmisión de la pelea Pacquiao-Díaz con una sola objeción (más acerca de esto más adelante), a pesar de haber sido un grupo integrado por dos hombres. De todas maneras se notó la ausencia de Larry Merchant o Max Kellerman. Es tan simple como eso. Espero que esta transmisión en manos de la dupla haya sido una situación única. Y para recordarle al equipo de gráfica de HBO: Díaz no ganó el título contra Erik Morales, tal como fue indicado en la transmisión. De hecho, realizó su primera defensa contra Morales. Por otro lado, otra gráfica establecía que Pacquiao iba por un título en su cuarta división, una noción mal transmitida por Lampley y Steward a lo largo de la transmisión. La gráfica establecía que Pacquiao había ganado títulos en las categorías de pluma junior, peso pluma y ligeros junior, agregando que iba por su cuarto en la categoría de ligeros. Aparentemente nadie se tomó el trabajo de fijarse bien. De haberlo hecho, se hubieran dado cuenta que su primer título mundial se dio en la categoría de peso mosca.
Apenas terminada la pelea de Pacquiao vs. Díaz, el promotor de Top Rank, Bob Arum, rápidamente viró su atención al prospecto de Pacquiao defendiendo su nuevo título de ligeros contra el titular de ligeros junior Edwin Valero, un boxeador que se uniría a Pacquiao en la categoría de las 135 libras. Si se da, creo que se trata de una victoria fácil para Pacquiao. Aunque sería violenta durante las primeras rondas, creo que eventualmente Pacquiao lo demolería. Valero es entretenido de observar pero cuando se enfrenta a un serio oponente, quedará expuesto como un luchador unidimensional con poca técnica o defensiva. Preferiría ver a Pacquiao enfrentarse a Soto. Y en un mundo ideal, preferiría ver a Pacquiao enfrentarse al titular unificado Nate Campbell. Arum nunca realizará la pelea porque es demasiado peligrosa.
Calculo que la categoría de las 135 libras es la nueva 130, debido al hecho que Pacquiao, Juan Manuel Márquez, Joan Guzmán y Valero están todos subiendo en peso.
Quizás haber tenido a su compañero de equipo olímpico de 1996 y a su amigo Fernando Vargas a su lado en el Mandalay Bay de Las Vegas fue un mal presagio para Díaz. El retirado Vargas no tiene los mejores recuerdos de Mandalay Bay. Es donde sufrió tres de sus cinco derrotas de carrera, cada una por nocaut. Ahora, Díaz y el pueden intercambiar historias sobre de que se siente ser vencido allí.
Se que faltan 25 días para que Miguel Cotto se enfrente a Antonio Margarito, y no puedo esperar. ¿Pero cuantos días faltan para la pelea entre Kelly Pavlik y Arthur Abraham?
Top Rank está presentando el sábado la secuela de Ricardo Torres y Kendall Holt en Showtime como una revancha sin excusas tras que torres detuviera a Holt de modo controversial el otoño pasado. Entonces cuando la revancha haya terminado, sin importar el resultado no quiero escuchar más excusas.
Tuve la oportunidad de conocer al titular de peso mosca Nonito Donaire en persona por primera vez la semana pasada en Las Vegas en la conferencia de prensa para anunciar su incorporación a Top Rank. Me quedé impresionado por el joven. Tiene mucho carisma, una personalidad avasallante y realmente sabe pelear. Con el cuidado indicado de Top Rank, Donaire tiene la oportunidad de convertirse en una de las estrellas más destacadas del boxeo en su peso.
En caso de que lo hayan olvidado: Hay un solo Ricky Hatton.
Volví a ver la destrucción de Miki Rodríguez en manos de Andre Berto de hace un par de semanas y debo decir que la combinación de doble golpe derecho que utilizó Berto para derribar a Rodríguez por primera vez en el séptimo round fue una belleza. No es el tipo de combinaciones que solemos ver. Es el tipo de combinación que un boxeador realiza por instinto. Cuando la vi creí que estaba viendo la reencarnación de Roy Jones Jr. y Shane Mosley.
Ruslan Chagaev y Vitali Klitschko firmaron para pelear, ¿Quién se echará atrás primero?
El titular de peso pluma Steven Luevano parece de 14 años y es el tipo de muchacho contra el que uno arremetería en la escuela, pero es un muchacho rudo. Recibió golpes duros de Mario Santiago en su pelea la semana pasada y se mantuvo de pie para un merecido empate. Me gustaría ver la revancha.
Para todos los que vieron la pelea de ligeros entre Anthony Peterson y Fernando Trejo por Versus la semana pasada, ¿Cómo se imaginan a un hijo con Peterson y Monica Seles como padres?
Para todos los enfadados tras que la revancha del 20 de septiembre de Floyd Mayweather Jr. y Oscar De La Hoya fuera cancelada tras el retiro de Mayweather el mes pasado, esto debería proporcionarles más dolor aún: De no haber sido cancelada la pelea, el tour mediático nacional hubiera comenzado el martes en Nueva York. Estaba programado para correr hasta el 11 de julio y pasar por 13 ciudades. Alas, el retiramiento de Mayweather realmente nos salvó de una pelea que realmente no queríamos ver.
Winky Wright, Winky, Winky, Winky. Ven aquí, Winky, Winky, Winky.
El vuelo a casa desde Las Vegas el domingo por la noche ciertamente fue mucho más placentero que el viaje a casa de Florida la semana pasada.
DVD de la semana: No tuve mucho tiempo, entonces ¿Qué les parece una pelea corta? Elegí la pelea de 91 segundos más famosa de todos los tiempos. Créanlo o no, fue hace 20 años, el 27 de junio de 1988, cuando Mike Tyson se metió en el ring tras haber agujereado una pared de su vestuario en el Boardwalk Hall de Atlantic City. Momentos más tarde, destruyó a Michael Spinks en un solo round. Tyson despejó toda duda cuando barrió a Spinks en un crucial display de poder para cementar su status como el campeón indiscutido de los pesados. Spinks, hoy un integrante del Salón de la Fama, nunca volvió a pelear. Fue la noche más impactante de Tyson. El espiral comenzó al poco tiempo.