<
>

No sabe a lo que juega...

Con la cuenta regresiva puesta en marcha para el Mundial, México sigue probando diferentes parados, posiciones, tácticas, alineaciones y no encuentra un estilo ni una condición de juego que realmente le garantice algo en el verano ruso. El entrenador sigue en lo suyo y la personalidad de los futbolistas no aparece por ninguna parte. La endeble y hasta equivocada estructura de selecciones nacionales no permite que alguien se siente con el entrenador y le pida cuentas o le dé un consejo. Queda muy poco tiempo por delante. La única esperanza es que los líderes morales de esta selección hablen con Osorio y le pidan encontrar juntos una forma de jugar que les permita encontrar su mejor nivel...

LOS ANGELES, CA,- Hay una notoria y justificada preocupación en el aficionado mexicano al futbol.

Con la cuentea regresiva puesta en marcha para el Mundial de Rusia, la selección mexicana no encuentra un estilo definido de juego. El entrenador Juan Carlos Osorio ha probado con diferentes parados de cancha, nombres, posiciones y ninguna parece acoplarse a las necesidades de juego de la selección. Hay tal pesimismo que muchos expertos sugieren que México tendrá muchos problemas incluso para atravesar con éxito la ronda de grupos de Rusia 2018, cosa que no ha sucedido en los últimos 25 años de competencia mundialista.

México no sabe a lo que juega. Un día lo intenta con tres defensores en el fondo, un 'rombo' en medio campo y tres delanteros y al otro amanece con un clásico 4-4-2. Los futbolistas juegan en posiciones diferentes a los de sus clubes y ha existido muy poca continuidad en los nombres de las alineaciones. México está hecho una "ensalada", un abanico de posibilidades que le gustan al entrenador Osorio, pero que no parecen darle certeza de aproximarse siquiera a un nivel competitivo apropiado para afrontar la cita mundialista.

No queda mucho tiempo por delante y no se ve por donde Osorio esté dispuesto a afrontar un cambio en su sistema. La única esperanza que prevalece es que los jugadores con mayor tiempo y jerarquía hablen con el entrenador y le expliquen que es mejor volver a una línea tradicional para tratar de encontrarse y encontrar la mejor manera de jugar y de funcionar. La semana pasada, Ricardo La Volpe, ex entrenador de la selección, urgía a que la personalidad del futbolista mexicano resurja para encontrar una solución. Anoche, en Futbol Picante, Hugo Sánchez resumía que el futbolista, a veces, tiene poco compromiso.

Hoy más que nunca la selección mexicana podría necesitar a Rafael Márquez. El vínculo de comunicación entre lo que el entrenador quiere y lo que los jugadores mejor pueden llevar a cabo. Márquez tendría más acceso y facilidad para explicarle a Osorio lo que en realidad necesita este grupo de futbolistas. Todo parte desde un asunto de estructura -para eso ya no hay tiempo ya, pero algún día tendrá que existir ese tiempo-. Las cosas no están puestas como para que alguien, de arriba, se siente y le explique a Osorio que México requiere de otras cosas en la cancha. ¿Hace cuánto que se ha sugerido un comité de futbol de las selecciones nacionales con personajes como Mejía Barón, Ferretti, Hugo Sánchez, La Volpe, Enrique Meza, Manolo Lapuente, Víctor Vucetich, que puedan pedirle cuentas y dar recomendaciones al entrenador nacional? Es un problema de estructura que espero que algún día cambie.

Lo que no sobra es tiempo ahora. La siguiente lista será la definitiva de 23 jugadores y habrá poca polémica. Y a partir de ahí, tres juegos más (Gales, Escocia y Dinamarca) antes del debut mundialista ante el cuatro veces campeón del mundo, Alemania. Y la verdad es qué por ahora, México no sabe a lo que juega...

@Faitelson_ESPN