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Hora de reconstruir: ¿Qué equipos deben renunciar a sus sueños de ser contendientes?

Los Filis de Filadelfia del 2011 fueron un gran equipo. Lograron 102 victorias, pero su temporada terminó en la Serie Divisional de la Liga Nacional viendo como Ryan Howard se retorcía de dolor por la línea de primera base tras quebrarse el talón de Aquiles en el out final del juego en una decepcionante derrota ante los Cardenales de San Luis.

Los Filis no sabían en ese momento que ese sería el final simbólico de una racha de cinco banderines consecutivos en la División Este de la LN. Ellos terminaron con marca de 81-81 en el 2012 y entonces promediaron 92 derrotas en las siguientes cuatro temporadas. Por supuesto, las críticas fueron letales en los años venideros, pero hay una pregunta justa que debe hacerse: ¿Cuándo uno sabe que su ventana de ser contendiente está a punto de cerrarse?

Es fácil evaluar el caso luego de ver el hecho de que los Filis esperaron demasiado para renovarse, y que ya en la temporada 2011 se veían señales de alerta. Siete de los ocho jugadores de posición titulares pasaban de los 30 años; dos de los tres ases tenían 32 y 34 años. Pero, ¿quién deshace un equipo de 102 victorias? Roy Halladay, Cliff Lee y Cole Hamels habían compilado marca combinada de 50-23 con efectividad de 2.50. Incluso si la alineación se veía vieja, tenían a ese tres ases en la rotación para sostener el barco a flote.

Pero todos sabemos lo que ocurrió. Halladay estaba acabado como lanzador efectivo y apenas pudo hacer 38 aperturas en las siguientes dos temporadas. Lee tuvo dos temporadas buenas adicionales antes de lastimarse en el 2014. Hamels fue finalmente cambiado en el 2015. La ofensiva, que fue la segunda mejor en anotaciones en el 2010, se desplomó hasta el puesto 13 en el 2013. Howard no podía ser cambiado, y la oficina central dejó por demasiado tiempo en el equipo a Jimmy Rollins y Chase Utley. Las fincas estaban desnutridas. Los Filis no volverán a ser contendientes hasta por lo menos el 2018.

Hay tres franquicias que se encuentran en una situación precaria al momento de entrar al 2017, con una ventana corta de contendientes antes que sea probable que comience un periodo negro. La esperanza es un último aleteo de gloria y eventualmente, una reconstrucción rápida. Yo no culpó a las tres franquicias por intentar una corrida más de playoffs, pero como le ocurrió a los Filis del 2012, la posibilidad de un desastre futuro pende encima de ellos.

Tigres de Detroit

Piensen en las señales de alerta de un equipo en declive:

1. Edad

2. Falta de profundidad

3. Pobre sistema de liga menor

4. Recursos financieros comprometidos o limitados

Estos cuatro problemas han estado encima de los Tigres de Detroit como un reflector de 200 watts desde hace algunos años. Ellos llegaron a playoffs en cuatro temporadas consecutivas, del 2011 al 2014, pero no han llegado a esa instancia en las últimas dos campañas a pesar de tener una de las nóminas más altas en el deporte. El gerente Al Avila, quien tomó las riendas del equipo en el 2015, indicó al principio de la temporada baja que los Tigres necesitaban pasar por un proceso de reconstrucción, pero en cambio el débil estado de la División Central de la Liga Americana los ha dejado estancados en un estanque de concreto recién tirado con el mismo roster.

Sus cuatro mejores bateadores en el 2016 fueron Miguel Cabrera (33 años), J.D. Martinez (28, pero será agente libre luego del 2017), Ian Kinsler (34) y Víctor Martínez (37). Ese grupo ha logrado envejecer bien, pero ya tiene un año más encima. Los agentes libres Justin Upton y Jordan Zimmermann tuvieron años decepcionantes. La rotación es inestable detrás de Justin Verlander y Michael Fulmer.

El asunto a largo plazo es que los Tigres tienen una nómina poco flexible. Cabrera está firmado hasta por lo menos el 2023; Upton se ganará $22 millones anuales hasta el 2022; a Zimmermann se le deben otros $92 millones hasta el 2020; Verlander está firmado hasta el 2019. El único salario grande que saldrá de los libros será el de Aníbal Sánchez luego del 2017.

Mientras tanto, el sistema de fincas no ha producido un jugador titular de calidad desde Rick Porcello en 2009. (Nick Castellanos no ha llegado ahí todavía). Está demostrando más potencial que lo que ha mostrado en años - aunque todavía sigue ubicado en el No. 24 en el ranking de Keith Law.

Sin embargo, lo extraño sobre la temporada baja de Detroit no es que ellos hayan decidido evitar una reconstrucción, sino que no han añadido nada para mejorar el equipo. ¿Por qué razón uno esperaría que un equipo envejeciente vaya a mejorar en la temporada siguiente? En cambio, los Tigres siguen teniendo un gran hueco en el jardín central, un bullpen mediocre, una banca débil y ninguna velocidad. Seguro, Upton y Zimmermann podrían tener mejores temporadas, y quizás Daniel Norris o Matt Boyd den un paso adelante, pero aqui no veo a un equipo que pueda llegar a las 90 victorias.

Marineros de Seattle

Los Marineros de Seattle igualaron a los Tigres con 86 victorias en el 2016, dependiendo de la alineación más vieja en la liga (la edad promedio de 30.4 según Baseball-Reference.com está medida por tiempo de juego). Aunque Nelson Cruz cumplirá 37 años el 1 de julio, Robinson Canó tiene 34, Félix Hernández llegará a los 31 en abril y viene de un año por debajo de las expectativas, y Hisashi Iwakuma cumplirá 36 en abril con exámenes médicos que atemorizaron a los Dodgers la pasada temporada baja, el gerente Jerry Dipoto espera que ese nucleo pueda llevar a su equipo a su primer boleto de playoffs desde el 2001.

Dipoto heredó una situación difícil el año pasado. El sistema de fincas estaba en ruinas, y aparte de Kyle Seager, todas las estrellas eran viejas y caras. Los dueños tuveron la 10ª mayor nómina en el 2016, pero eso no fue suficiente a pesar que Cruz y Canó tuvieron temporadas monstruosas. Jerry, a quién le encanta hacer cambios, ha hecho más ajustes en esta temporada baja, al mejorar la profundad tras salir mediante cambio de uno de los mejores prospectos en su sistema - el lanzador zurdo Luiz Gohara - además de Taijuan Walker, el ex primer seleccionado Alex Jackson y otros prospectos Grado C por talento para ganar ahora en Jean Segura, Drew Smyly, Danny Valencia y Carlos Ruiz. Cambió cuatro años de control de Nate Karns por un año de Jarrod Dyson.

Estas fueron las movidas correctas mientras los Marineros intentan exprimir otra corrida de playoffs de Cruz, Canó y Hernández, pero el estado del sistema de fincas significa que no hay un talento obvio en camino al equipo grande para eventualmente sustituir o reemplazar a las estrellas envejecientes. Los Marineros no tienen tantos contratos caros a largo plazo como los Tigres -- Cruz está firmado hasta el 2018, Félix hasta por lo menos el 2019, Seager hasta el 2021 y Canó hasta el 2023 - pero la ventana con este grupo es probablemente el 2017 y el 2018, y eso es asumiendo que Hernández e Iwakuma se mantengan saludables.

Orioles de Baltimore

Los Orioles de Baltimore han llegado a la postemporada en tres ocasiones en cinco años, pero encaran dos grandes dolores de cabeza financieros luego de la temporada 2018. En ese momento será cuando Manny Machado y Zach Britton se conviertan en agentes libres. Machado no ha mostrado interés en firmar una extensión antes de la agencia libre. Y Britton está representado por Scott Boras, así que probablemente esté encaminado hacia la agencia libre. Los Orioles han tenido nóminas de nivel mediano en temporadas recientes, así que firmarlos no está completamente fuera de la cuestión. Pero Machado estará siendo obviamente cortejado por los equipos de mercado grande... ustedes saben, como los Medias Rojas y los Yankees, los que tendrán un hueco disponible en la tercera base para el 2019.

Más allá de ese problema, los Orioles ya han visto los mejores días de Adam Jones y J.J. Hardy. Chris Tillman será agente libre luego del 2017. Ellos le dieron a Chris Davis $161 millones la pasada temporada baha, y tuvo números poco inspiradores, .221/.332/.459. Ellos esperan un regreso de su parte, al igual que de Mark Trumbo para producir algo parecido a los 40 jonrones nuevamente.

¿Y el sistema de fincas? Law lo ubicó como el 25º mejor en las mayores, y solo el receptor Chance Sisco parece estar a punto de llegar a las Grandes Ligas. Dado el inestable estado de la rotación y una alineación en la que todos los chicos clave excepto Machado y Jonathan Schoop tienen más de 30 años, no hay garantías de que esa ventana ya no se haya cerrado.