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A Manny Pacquiao le viene cayendo como anillo al dedo aquel dicho de que 'no es lo mismo los tres mosqueteros que 20 años después', y es que a la estrella del boxeo filipino parece que las cosas en el campamento se le están complicado, para encarar su regreso al ring el próximo 5 de noviembre en el Thomas & Mack Center de Las Vegas. En busca del campeonato welter de la Organización Mundial de Boxeo en poder de Jessie Vargas, Pacquiao ha tenido que padecer, de acuerdo con reportes del Manila Bulletin, con algo de gripa y calambres, aunque ello no termina por detener su regreso al ring. Según los reportes de Nick Giongco, Pacquiao no entrenó el fin de semana por gripa pero esta semana se reincorporó a sus entrenamientos con bastante intensidad; sin embargo, ahora el problema es otro, y no es nuevo: los calambres. "Un viejo problema resurgió al final de los cinco asaltos de la sesión de sparring que tuvo con José Ramírez, cuando se quejó de un dolor en la pantorilla derecha. Resultó que eran calambres", señala el periódico tagalo. Cuando al fin dominaron el dolor, Pacquiao hizo dos rounds de sparring más con el peleador local Leonardo Doronio y luego trabajó manoplas y peras en el gimnasio, aunque, según reporta el diario, no hubo satisfacción por parte del equipo de Manny. Justin Fortune, preparador físico de Pacquiao, dijo que no debe ser un problema grave de arreglar en el campamento, y eso que sólo faltan pocos días para volar a Estados Unidos a cerrar con la preparación antes de llegar a la semana de la pelea. Explicó el preparador que se debió a que Pacquiao corrió fuerte e hizo sprints en vez de trotar como le habían pedido, lo cual no sucederá de nuevo, debido a que no quieren que esté batallando con los calambres, motivo de críticas en muchas de sus peleas pasadas. Por lo pronto, a Pacquiao le quedan pocos días de campamento en Las Vegas, mientras que Jessie Vargas, el campeón Welter OMB, se mantiene sin contratiempos entrenando a tope en su ciudad sede y sede también del pleito que Top Rank va a distribuir a través de la señal de pago por evento.
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