Boxeo
Salvador Rodríguez | ESPN.com 7y

JC Chávez volvió a ser el 'César del Boxeo'

LOS ÁNGELES -- No habrá nunca más otro Julio César Chávez y él y la gente lo saben.

La leyenda del boxeo mexicano tuvo su show propio en la Plaza México de Lynwood, California, se dejó querer, se dejó aplaudir, dijo groserías, hizo reír a la gente, la hizo vibrar y la afición le hizo sentir de nuevo el significado de lo que es ser un JC Chávez.

El “César del Boxeo” participó en la última conferencia de prensa de la gira promocional de la pelea de Canelo Álvarez vs. Julio César Chávez Jr. y ahí, sin ser agresivo, brindando respeto a Canelo y alentando a su hijo, gozó en verdad la conferencia y provocó que se unieran los fans.

Ante miles y miles de aficionados que esperaron desde las 11 a.m. la conferencia, que comenzó después de las 5 p.m., JC se reveló tal cual es: afable, carismático y, aunque dijo malas palabras, la gente se lo celebró.

“Esta pelea significa mucho para Julio, porque sabemos lo que Canelo representa a nivel mundial”, estableció JC con evidente respeto por el tapatío. “Pero Canelo siempre ha sido el más fuerte y hoy está del otro lado, esa es la incógnita”.

La leyenda del boxeo mexicano se divirtió y cuando el promotor Oscar de la Hoya, su victimario hace 20 años, recordaba las guerras en el ring, le respondió de forma muy directa.

“Me ganó, porque me agarró viejo, si no, me lo hubiera chingado”, dijo JC, causando un arranque de carcajadas, incluso la de Oscar.

“Esta pelea es para ustedes, esta pelea la va a ganar quien tenga más cojones. Como dicen vulgarmente, la va a ganar quien tenga más hue***”, afirmó el “César”, mientras le aplaudían Canelo y su hijo por igual.

Fue la tarde de JC , quien previamente había pedido a Canelo y Junior que se olvidaran del tema de la apuesta.

JC gritó “!Viva México Cab***!”, cuando se habló del tema de los migrantes y para cerrar, cuando le pidieron su opinión sobre su hijo, primero se divirtió y le dijo a la fanática: “’¿What Happen?’”, provocando otra cargada de risas del respetable y no se detuvo ahí.

“Pienso que mi hijo está bien guapo”, agregó antes de soltar esa carcajada que fue la tarjeta de presentación de su carisma mientras llegaba a la cima, amén de su talento sobre el ensogado.

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