La pelea por el título mundial de peso pesado entre Anthony Joshua y Wladimir Klitschko es una de las mayores en la división en muchos años, quizás desde lo que resultó ser la despedida de Lennox Lewis contra Vitali Klitschko, el hermano mayor de Wladimir, en el 2003.
Otros podrían verlo como la pelea por el título más importante de los pesos pesados desde que Lewis eliminó a Mike Tyson en su encuentro cumbre inevitable en el 2002.
Pero dondequiera que usted coloca a Joshua-Klitschko en el panteón de peleas de título de peso pesado, es algo importante. Algo muy importante, como lo demuestra el hecho de que habrá una multitud récord en el boxeo británico de unos 90,000 fans en el Estadio de Wembley, que agotó sus boletos para la pelea el sábado (en vivo en Showtime a las 4:15 pm ET, grabado en HBO a los 11 Pm ET/PT).
Es un enfrentamiento clásico entre boxeadores estelares con gran poder que están en diferentes etapas de sus carreras.
Joshua (18-0, 18 KO), de Inglaterra, es el titular reinante de 27 años de edad, un joven león poderoso tal vez ni siquiera aún en su apogeo. Muchos lo ven como el futuro de la división, si no es que ya llegó mientras se alista para su tercera defensa de título.
Klitschko (64-4, 54 KO) es el ex campeón por largo tiempo que busca detener al joven y recuperar la gloria que lo tuvo en el trono de peso pesado durante una década en uno de los reinados de título más dominante en cualquier división en la historia del boxeo.
La pelea ha capturado la imaginación de los fanáticos del boxeo por el hecho de que podría señalar un cambio real de la guardia en la división glamur del boxeo. Joshua, con una enorme base de aficionados en el Reino Unido, es el favorito y peleará en casa, donde se enfrentará por mucho a su oponente más importante.
Klitschko, de 41 años, se ha enfrentado a todo tipo de titulares, contendientes y oponentes invictos durante sus 21 años de carrera. Pero esta es la primera vez que Klitschko entrará en una pelea percibida como un viejo y no favorecido. Es un papel que él ha abrazado durante la promoción. Él siente que podría ser subestimado, lo que podría hacer las cosas terriblemente interesantes.
Basado en sus peleas más recientes, es comprensible por qué Joshua es favorecido para ganar. Ya perfecto a través de sus primeras 17 peleas, Joshua se veía magnífico cuando fue el último en el ring el 10 de diciembre en Manchester, Inglaterra.
Con Klitschko en el ringside esperando a que Joshua ganara para establecer su pelea, que ya estaba negociada, Joshua destruyó al estadounidense Eric Molina por nocaut en el tercer asalto.
Lo derribó con la mano izquierda en el tercer round y lo siguió con un brutal ataque de golpes que dejó a Molina en pie y el árbitro saltó para salvarlo de más castigo.
Joshua, por supuesto, era amplio favorito para derrotar a Molina, que sólo consiguió seis golpes en la pelea en comparación con 38 de Joshua. Pero lo que hizo el rendimiento de Joshua aún más impresionante fue el hecho de que Molina había pasado nueve asaltos difíciles con el titular Deontay Wilder 16 meses antes, pero Joshua lo destrozó. Hay muchos que ven a Joshua y Wilder como los dos mejores en la división, aparte de Klitschko, por lo que siempre es divertido comparar.
Pero a diferencia de la última pelea de Joshua, Klitschko lució terrible y es la razón principal por la que Joshua es favorecido y por qué la pelea fue hecha en primer lugar.
Klitschko parecía una bala desgastada la última vez, que fue hace 17 meses, cuando perdió una clara decisión unánime (y sus cinturones de título) ante Tyson Fury, el perturbado compatriota británico de Joshua, que abandonó sin nunca defender y se retiró en dos ocasiones de una revancha con Klitschko.
Klitschko se brindó una actuación terrible en una pelea horrible. Él aparentó cada día de su edad esa noche -- 39 en ese entonces -- contra su oponente de 27 años (¿suena familiar?) Después de haber dominado a oponentes con habilidades similares.
Klitschko apenas podía aterrizar o incluso salir de cualquier golpe. De acuerdo con las estadísticas de puntuación de CompuBox, Klitschko aterrizó sólo 52 de 231 golpes (23 por ciento). ¿Cincuenta y dos golpes en una pelea de 12 asaltos? Eso es tan malo como puede ser, especialmente para un boxeador con un arsenal ofensivo tan diverso y gran poder en ambas manos. Pero Klitschko no podía apretar el gatillo.
Fury no era mucho mejor, pero esto fue sólo un mal desempeño de Klitschko. Así que si alguien está basando su selección en la pelea de Joshua-Klitschko sobre cómo cada hombre se desempeñó en su pelea anterior -- otro desempeño destructivo de Joshua y uno triste de Klitschko en una derrota -- tiene sentido.
Pero recuerde una cosa: Mientras que el boxeo es el deporte de los jóvenes, Joshua nunca se ha enfrentado a un oponente remotamente cerca del talento, la experiencia y logros de Klitschko, lo que sabe por haber sido uno de sus compañeros de sparring en el pasado . También, Klitschko fue descartado anteriormente cuando sufrió derrotas por nocaut hace más de una década, pero volvió para anotarase grandes victorias.
Joshua, cuya barbilla parecía batible en su nocaut de Dillian Whyte en 2015 (en la pelea antes de que ganara su título mundial) puede muy bien vencer a Klitschko como muchos esperan, pero quede advertido: No confíe demasiado en los resultados de sus más recientes peleas.