LAS VEGAS -- Las especulaciones comenzaron temprano, incluso desde la noche anterior.
Julio César Chávez Jr. estaba en peso para enfrentar a Saúl "Canelo" Álvarez en un máximo de 164.5 libras este sábado en el T-Mobile Arena.
Chávez marcó "idénticas" 164 libras que "Canelo" Álvarez en el último requisito antes de pelearse.
Y con eso coronaron la fiesta en el MGM Grand Garden Arena, a donde más de 7 mil personas asistieron para crear una de los ambientes más espectaculares que se recuerden del boxeo mexicano contemporáneo.
"Hay muchas contradicciones aquí con la Comisión Atlética de Nevada", dijo Julio César Chávez padre en el programa Semana de Campeones de ESPN después del pesaje. "A los dos los pesaron antes de subir a la báscula en el pasillo y Julio pesó 163.8 libras. Esas dos (onzas) pudieron costar un millón de dólares".
Sin embargo, desde más de dos horas antes de que los protagonistas de la velada boxística del Cinco de Mayo subieran a la romana, los seguidores de ambos ya disfrutaban; tenían su propia "pelea" de porras, en donde los que prefieren a Chávez comienzan a emparejar la cantidad.
"Yo creo que hoy hubo más gente apoyando a Chávez que a 'Canelo'", dijo Luis González, un mexicano que vacaciona en Las Vegas y que asistirá a la pelea. "O los de 'Canelo' estaban más callados o eran mucho menos".
La diferencia, al menos desde el estrado principal, no fue evidente. Sólo sonaba la música tradicional mexicana, por momentos de mariachi, típico del Guadalajara de "Canelo" Álvarez, o con la banda sinaloense de Chávez.
Subieron primero los preliminaristas. Para buena fortuna ninguno de los boxeadores y boxeadores que estarán en las nueve peleas de la función dejó el peso pendiente; cuando mucho tuvieron que desnudarse por completo para marcar el límite y no pasó del susto.
Entre los pesajes, las voces en el escenario presentaron a diversas personalidades del pugilismo actual y pasado, mientras la gente seguía con las ovaciones y su propia fiesta arriba en las tribunas.
Pero cuando "Canelo" Álvarez y Chávez asomaron en las pantallas durante su llegada a la arena, a la gente le importó absolutamente nada lo que pasaba en el interior; todo se volteó hacia los protagonistas.
Alrededor de 20 minutos después fue cuando aparecieron en el escenario. "Canelo" Álvarez serio y con mirada penetrante, como siempre. Chávez lucía, también como ha sucedido toda la semana, más suelto, juguetón y a simple vista despreocupado.
La gran diferencia fue su muy delgado físico, el que tuvo que perder cerca de 30 libras para hacer lo que muchos consideran imposible; que seguramente se traduce en trabajo, preparación y disciplina...
Y al final, como dice su legendario padre, "El Gran Campeón Mundial Mexicano", "hay tiro" del Cinco de Mayo este sábado entre los dos mexicanos más populares del momento.