|
Miguel Berchelt lo había advertido y cumplió. El “Alacrán” ganó la guerra con inteligencia ante Takashi Miura en el Forum de Inglewood, California, y retuvo el cetro Superpluma del Consejo Mundial de Boxeo al llevarse una decisión unánime amplia y justa en su primera defensa del fajín verde y oro de las 130 libras en una cartelera de Golden Boy Promotions. Como se esperaba, Berchelt fue inteligente, por momentos lastimó a Miura, quien en el primer round visitó la lona tras una izquierda fuerte del campeón, pero siempre estuvo ahí peligroso, tratando de hacer explotar la dinamita de sus nudillos. Al final las tarjetas fueron de 119-108, 120-109 y 116-111 para el mexicano. Berchelt demostró que tiene la capacidad para competir con los mejores y se consagró ante un rival que siempre fue peligroso, pero al que dominó prácticamente en todo momento. Con este resultado, Berchelt mejoró a 32-1 y 28 nocauts por 31-4-2 y 24 nocauts del japonés.  En el arranque de la pelea no hubo mucha acción. Berchelt controló con el jab, midiendo al enemigo y Miura evitaba irse al frente. Fue hasta que el púgil tricolor lanzó un gancho de izquierda que agarró mal parado al nipón y lo envió a la lona para definir el asalto a su favor. Berchelt se mantuvo en la estrategia en el segundo, logró ser eficaz boxeando hacia atrás. Miura comenzó a soltar las manos, pero el “Alacarán” fue más eficaz con el boxeo en largo, sus rectos le dieron resultado y con ello preocupó lo suficiente a Takashi. El tercer round se caracterizó por tres cabezazos. Miura fue al frente con la cabeza por delante y Berchelt se estuvo quejando de ellos. El japonés soltó con más ritmo y conectó un fuerte gancho al estómago del mexicano, que cerró mejor con golpes rectos evitando que se le metieran a la guardia. Berchelt mantuvo con disparos rectos el control en el cuarto sobre un Miura que estuvo cazándolo, pero que simplemente no lo encontró y, al contrario, recibió al menos un par de combinaciones de dos y tres impactos del cancunense que, atento a las indicaciones de Alfredo Caballero, nunca se quedaba a fajarse. Miura comenzó a meter fuerte la izquierda en el quinto y al menos conectó sólido unas cuatro veces, pero sin lastimar al mexicano, que lanzó bien el jab y hasta metió la derecha en un par de ocasiones para emparejar el episodio. El asalto fue parejo, con ligera inclinación para el kamikaze. Con mucha concentración, Berchelt salió a evitar las izquierdas peligrosas de Miura en el sexto round, en el que lució un poco desesperado y por momentos atacó de manera descontrolada. El mexicano metió bien el jab y cerró fuerte con tres derechas consecutivas para suma otro capítulo a su favor. El japonés se dejó llegar el jab del mexicano en el séptimo, Berchlet comenzó a pararse un poco y le metieron la mano izquierda fuerte y ello lo obligó a moverse nuevamente para lanzar de nuevo sus rectos para evitar que el asiático ganara más confianza. Advertencia para Miura en el octavo por golpear en la nuca al mexicano. Berchelt se mantuvo ligeramente a la distancia con el jab por delante y luego le metió una sólida derecha que lastimó al japonés, quien no se rindió, pues cerró fuerte el round con las izquierdas por delante. A Berchelt se le notó un poco cansado en el noveno. Miura recibió un fuerte gancho de izquierda del mexicano, pero aún así fue por él y empezó a conectar fuerte con la mano izquierda en forma de recto y volado al campeón para hacer pensar que nada estaba definido. Con menos piernas en el décimo, el tricolor tuvo que echar mano de sus recursos para evitar el peligroso contacto de Miura, quien buscó sólidos ganchos a las zonas blandas del campeón que acusó recibo, aunque se mantuvo vivo gracias a que estuvo lanzando el jab de vez en vez e, incluso, hasta con buenas posibilidades de ganar el round. Berchelt echó mano de su corazón y cintura para el undécimo. Al saber que Miura estaba lejos de rendirse, Miguel comenzó a plantarse un poco más y ahí, con combinaciones de hasta cinco golpes, logró llevarse la ventaja en el ensogado ante un japonés herido, pero no acabado. En el duodécimo, a pesar de la ventaja que pensaba que tenía en las tarjetas, Berchelt no rehuyó al fuego y Miura, aunque buscó el nocaut, no tuvo ni la fortaleza ni la inteligencia para sacar el triunfo ante un “Alacrán” que cumplió su palabra de ganar la guerra con inteligencia.
|
