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Domina Floyd Mayweather a un McGregor que batalló gallardamente

LAS VEGAS -- Con Floyd Mayweather los riesgos con calculados, absolutamente todos y en su mundo, no había manera de que perdiera, 'Money' llegó a 50 victorias como profesional ante un boxeador debutante como Conor McGregor que es una gran estrella en el mundo de las artes marciales mixtas, pero en el ring de la T-Mobile Arena terminó pagando el precio en una pelea dispareja.

La saga concluyó con un dominante Mayweather que noqueó a McGregor en el décimo round de la masivamente esperada pelea del peso Junior Welter ante 14,623 aficionados que no llebaron la T-Mobile Arena.

Los jueces Guido Cavalieri y Burt Clemens dieron sólo un round al peleador irlandés sobre Floyd Mayweather en la pelea, y el primero marcó como 10-8 en el noveno asalto a favor del estadounidense, uno antes de la detención de la pelea.

Las tarjetas de los jueces tras la pelea se dieron a conocer y fueron de 87-83, 89-82 y 89-81 a favor de Mayweather. La primera tarjeta fue de Dave Moretti, que estuvo más acorde a lo que se había visto en la arena, donde Floyd prácticamente le regaló los tres primeros episodios al irlandés.

Moretti también dio 10-8 a favor de Mayweather en el noveno episodio tras el amplio dominio de Floyd, incluso sin haber caída, lo cual es completamente válido; sin embargo, en esos tres minutos hubo algunos chispazos del agotadísimo McGregor que bien valían el 10-9. La mayoría de los medios en la arena tenían 87-84 a favor de Mayweather, y también 88-83 a favor del estadounidense, que esta noche llegó a 50-0 como peleador profesional tras 21 años de carrera, mientras que McGregor, quien dijo que pensó que la pelea estaba cerrada, se quedó con 0-1.

Mayweather le regaló a McGregor los tres primeros asaltos pero después se le vio atacar como nunca antes y es que ya había sentido al enemigo. "Se lo debía a los fans por la pelea ante Pacquiao, lo respeto porque es un competidor duro", dijo Floyd al final de la pelea, que ganó al minuto con cinco segundos del décimo episodio, cuando ya las piernas y el cansancio habían traicionado a McGregor.

McGregor no se fue al frente como todo mundo esperaba, espero a Mayweather que se adaptó pronto y recibió poco castigo. El jab de derecha del irlandés le hizo pasar algunos problemas pero al final no marcó diferencia para evitar que llegara el 50-0. "Esta fue mi última pelea damas y caballeros", destacó.

Mayweather comenzó a atacar a partir del cuarto round, le metió fuerte la derecha arriba en distintas ocasiones y también combinó con sólidos ganchos abajo que le fueron restando gasolina al irlandés que perdió poco a poco la compostura y terminó por ceder ante uno de los mejores boxeadores de todos los tiempos.

"Lo convertí en un mexicano esta noche, peleó como mexicano", dijo McGregor al finalizar la pelea, reconociendo la agresividad del púgil estadounidense que cumplió con la promesa de terminar esta noche por la vía corta y no dejó a los jueces la oportunidad de decidir la pelea, que por cierto llevaba ESPN arriba por 87-84.

Y no hubo sorpresa, porque con Mayweather las sorpresas se acabaron hace tiempo. Pero sí cumplió con lo dicho ante un peleador al que de arranque no debió haber enfrentado en busca de su victoria quizá más importante en una carrera de 21 años.

McGregor no fue un payaso en el ring, perdió una compostura una que otra vez pero se comportó a la altura hasta que pudo. Al final le pararon bien la pelea porque era ya una paliza y ahí se estaban aprovechando Floyd de él. Floyd pretendía embolsarse más de 300 millones y McGregor unos 100 millones. Al final todos ganaban.

Con este duelo, Mayweather habrá colgado entonces los guantes dejando un legado grandioso que podrá ser o no criticado por este último combate, pero que tuvo antecedentes grandiosos ante lo mejor de su época. A McGregor lo que le queda será volver a la UFC y seguir siendo estrella, aunque ahora será una que cobrará muchos más millones que antes.

El combate fue el primero de McGregor, una estrella del UFC que retó y convenció a Mayweather a regresar del retiro tras dos años y meses fuera del ring. La pelea, aunque desigual, fue la que mayor apuestas ha registrado en la historia del boxeo, sobrepasando los $80 millones, e incluyendo seis de $1 millón.

McGregor fue el primero en entrar a la arena, que no estaba vendida en su totalidad, y mantuvo el favor de los fans. Mayweather entró último, enmascarado y vestido de negro.