El clamor generalizado por la pelea de pesos pesados entre Deontay Wilder (39-0, 38 KOs) y Anthony Joshua (20-0, 20 KOs) ha causado ya un efecto positivo, pero quizá las negociaciones no van a tener resultados tan pronto como todo mundo espero, sino quizá a mediados de año cuando los dos hayan realizado una pelea más en sus carreras.
El campeón del Consejo Mundial de Boxeo, Wilder, pidió a sus representantes encabezados por Al Haymon y Shelly Finkel, entablar negociaciones con el equipo de Joshua, titular Pesado de la Federación Internacional de Boxeo y de la Asociación Mundial de Boxeo, encabezado por el promotor Eddie Hearn, y tras una cita en Nueva York, los primeros reportes señalaron que las cosas avanzan con paso lento.
"Fue una reunión placentera. No puedo decir mucho pero fue algo positivo y las pláticas van a continuar, somos optimistas", dijo Hearn en entrevista con el portal Boxingscene tras la reunión matutina. "No debemos andar entre la fantasía y la realidad, si podemos hacer un gran acuerdo no hay impedimento para que esa pelea sea la que sigue", añadió el promotor pero en charla con Sky Sports.
Los primeros reportes dicen que al menos los dos mostraron interés en la pelea y se analizó el mercado para la posible pelea; sin embargo, hoy es más viable que Joshua unifique cetros con el campeón de peso pesado de la Organización Mundial de Boxeo, Joseph Parker.
Hearn se sorprendió al señalar que en Estados Unidos existe la creencia que Joshua es quien tiene miedo para tomar la pelea cuando en realidad también le pidió a su compañía, Matchroom Boxing, que haga lo necesario para conseguirle ese pleito unificatorio que detendrá el mundo del pugilismo por primera vez en muchos años.
Por lo pronto, de concretarse Joshua-Parker y ganar, como se espera, Anthony, entonces la pelea ante Wilder será por los cuatro títulos de boxeo profesional, ya que Deontay ostenta el verde y oro del CMB, lo cual daría un valor agregado a la esperada reyerta.