Boxeo
Salvador Rodríguez | ESPN Digital 6y

Prometen fuegos artificiales David Lemieux y Billy Joe Saunders

Con promesa de fuegos artificiales se presentaron a la última conferencia de prensa el campeón mediano de la Organización Mundial de Boxeo, Billy Joe Saunders, y el ex campeón David Lemieux, de cara a la pelea que sostendrán este sábado en el Place Bell de Laval, Canadá, y que transmitirá la cadena HBO en busca de una oportunidad ante Canelo Álvarez o Gennady Golovkin en 2018, aunque adelantaron el jueves un careo intenso que elevó la adrenalina.

Si bien las palabras del local Lemieux fueron amenazantes, Saunders no se intimidó en suelo enemigo. El primero prometió sangre y bombazos, el segundo le pidió no poner excusas cuando demuestre que ante los rivales de elite simplemente no tiene la capacidad para sobresalir.

"Se llegó la hora de andar el camino, Veremos si Saunders tiene buena quijada, él puede decirme rana o que tengo las piernas cortas, veamos qué tan bien puede respaldar sus palabras", estableció Lemieux, excampeón Mediano de la Federación Internacional de Boxeo y uno de los posibles enemigos de GGG y Canelo en caso de ganar.

"A la gente le gusta la sangre y los grandes golpes, y eso es lo que van a ver el sábado, al menos de mi parte", agregó Lemieux, quien no es favorito, pero por muy poco, en las apuestas especializadas al estar 1.1 a 1 abajo en los momios ante el campeón invicto Saunders.

"Un peleador contento es un peleador peligroso, y yo no recuerdo haber estado tan contento como ahora lo estoy. Me siento emocionado por subir al ring", externó el campeón Saunders, de Gran Bretaña, que hará la tercera defensa del fajín que ganó a Andy Lee.

"Sé que Lemieux tratará de noquearme desde el primer round porque es un peleador que suele lesionarse. Yo no quiero excusas de David, le ha ido bien y mal contra rivales de elite, y yo confío en que puedo manejarlo. Después de Lemieux quiero a Golovkin o Canelo", puntualizó el británico, que hará la primera pelea fuera de casa.

Hacia el final de su turno al micrófono, Saunders le apostó 500 mil libras esterlinas a Lemieux con la finalidad de destinar el monto a una fundación que ayude a los enfermos con cáncer, pero de arranque no obtuvo respuesta inmediata de parte de su retador, con quien tuvo un cara a cara intenso en suelo canadiense tras la conferencia.

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