Camino a los dos meses trabajando con su nuevo equipo, conducido por Gustavo Herrera - que ya lo dirigiera cuando ganó su primer título mundial- Román "Chocolatito" González trata de recuperar viejas herramientas y ensaya un nuevo estilo para su boxeo. El nicaragüense, que podría regresar el próximo 5 de mayo bajo la cartelera encabezada por Golovkin-Canelo II, acelera su preparación física y técnica-táctica, buscando corregir errores defensivos y mejorar su ataque. No obstante, por sobre todas las cosas, busca recuperar la confianza en sí mismo para encaminarse a la meta prioritaria, volver a los primeros planos.
De ello conversó con ESPN Digital su nuevo entrenador, Herrera, que viene conduciendo el trabajo desde diciembre, primero de manera informal y luego de forma oficial cuando fue ratificado en el cargo.
"Román ha sumado unos 35 asaltos contra rivales de su mismo peso, en general amateurs aunque también contra profesionales de su mismo peso", dijo Herrera, refiriéndose en el último caso, a los 12 minutos de trabajo intenso que realizó contra su primo Cristofer Rosales, que pelea en 112 libras. "Chocolatito viene agarrando nivel y la idea para las próximas sesiones de sparring, es ir aumentando el peso de sus rivales, que sean una oposición más exigente".
El ex campeón mundial nicaragüense alterna su preparación física por un lado y el desempeño técnico-táctico por el otro. En este último aspecto, Herrera reconoce que hay mucha tarea por delante.
"Hemos estado trabajando mucho sobre la defensa, especialmente con los "escapes", reveló. "Chocolatito sabe poner presión, sabe cortar el ring y puede trabajar ofensivamente en espacios reducidos, pero no todos los combates se pueden afrontar de la misma manera", entendió Herrera. "Habrá momentos en que sea el rival que ponga presión ofensiva y Chocolatito deberá estar preparado para escapar al acoso".
Otra preocupación del nuevo cuerpo técnico de Chocolatito, pasa por la recuperación de algunas armas ofensivas como el gancho de izquierda, quizás, el mejor golpe en el arsenal del nicaragüense.
"Además de trabajar en los escapes defensivos, estamos enfocados en aumentar la velocidad y en insistir con mucho trabajo por laterales" sostuvo Herrera. "Hemos estado acordándole de cosas olvidadas, como el gancho de izquierda en repetición, que por mucho tiempo le dio tan buenos resultados".
El nuevo entrenador, asimismo, consideró que no han existido problemas de adaptación por parte de Chocolatito a su nuevo equipo, algo que sin duda favorece su recuperación desde lo mental.
"Él ya había trabajado bajo mi dirección cuando fue campeón por primera vez y eso ha facilitado las cosas", dijo Gustavo Herrera. "Chocolatito está feliz, entusiasmado con en esta etapa de su carrera y todos estamos trabajando con la intención de que regrese competitivo a las carteleras estelares".
Con relación al aspecto mental, el entrenador dijo que "su pupilo está muy enfocado, por más que vamos paso a paso", destacó. "Mi primer consejo fue buscar para su regreso un rival cómodo, aunque eso lo decidirán sus manejadores", acotó. "Lo importante es que está activo en el gimnasio, se siente contento, pensando en el futuro y dejando atrás sus últimas derrotas".
Por último, ante la incertidumbre sobre el lugar definitivo del campamento (Nicaragua, Costa Rica o California) le preguntamos sobre el lugar donde se siente más cómodo para trabajar y que eventualmente, sienta que beneficia en mayor medida al rendimiento de Chocolatito.
"Cuando 'Chocolatito' se hizo campeón por primera vez, lo hicimos trabajando desde Nicaragua", recodó Herrera. "Román salió hacia Japón para coronarse campeón y paso lo mismo con José "Quiebra Jicara" Alfaro, que salió para Alemania donde ganó su cinturón mundial. No hay problema, si hay que viajar lo hacemos, pero me siento más cómodo en Nicaragua", aclaró el nuevo entrenador de Chocolatito.