Freddie Roach no será el entrenador de Manny Pacquiao para un combate por primera vez en casi 17 años, cuando el filipino rete el próximo 14 de julio al argentino Lucas Matthysse en Kuala Lumpur, Malasia, por el cetro welter de la Asociación Mundial de Boxeo.
Si bien ya desde hace unos días había información sobre la separación del equipo, e incluso Michael Koncz dejó ver a ESPN desde el pasado 6 de abril que Buboy Fernández sería el encargado del campamento, fue hasta el viernes que el propio Roach confirmó mediante comunicación escrita que no estará acompañando al legendario boxeador luego que Pacquiao dejara saber sus intenciones.
"Manny y yo tuvimos una gran corrida por 15 años -- más que muchos matrimonios y ciertamente algo raro en el boxeo", dijo Roach. "No cambiaría nada. Dentro del cuadrilátero boxístico y político, le deseo a Manny lo mejor".
Roach confirmó que Pacquiao no le comunicó su decisión personalmente, algo que aseguró que causó gran dolor. Sin embargo, afirmó que los buenos tiempos son mejores que la situación en que se dio la separación, reportada el viernes por el diario Los Angeles Times.
"Mentiría si no dijese que no me dolió que no me contactara personalmente sobre su decisión, pero los buenos tiempos que disfrutamos juntos tienen más peso que eso", añadió Roach,.
Con Roach en su esquina, Pacquiao conquistó los títulos de peso súper gallo de la Federación Internacional de Boxeo, el súper pluma, ligero y súper welter del Consejo Mundial de Boxeo, además del welter de la Organización Mundial de Boxeo, triunfando ante rivales de la talla de Marco Barrera, Juan Manuel Márquez, Érik Morales, Óscar de la Hoya, Miguel Cotto y Antonio Margarito.
Roach, quien tuvo en Pacquiao a su mejor peleador, fue considerado siete veces como el mejor entrenador en los años 2003, 2006, 2008, 2009, 2010, 2013 y 2014 y gozó de un reconocimiento que pocas veces se le había dado a un entrenador, sobre todo porque en todo ese tiempo ha tenido que estar lidiando con el Mal de Parkinson.
En los últimos campamentos, Roach y Pacquiao no habían tenido la mejor relación e incluso el estadounidense se había quejado en algunas ocasiones de la falta de disponibilidad del político filipino para dedicarse al mundo boxístico, lo cual no cayó bien del todo en el peleador tagalo.
Pacquiao va a estar entrenando en Filipinas mientras espera a Lucas Matthysse para anunciar de manera oficial la pelea por el fajín de las 147 libras que el argentino Matthysse ganó en enero pasado ante el tailandés Tewa Kiram en una velada de Golden Boy Promotions que transmitió ESPN.