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Gassiev vs.Usyk, choque de poder y estilo para otra final en Rusia

El momento ha llegado y el suelo ruso albergará al verdadero “choque” de trenes del boxeo profesional en el 2018: la gran final de la Súper Series y unificación total de la división crucero. La batalla entre los invictos Murat Gassiev (26-0, 19 KOs) y Oleksandr Usyk (14-0, 11 KOs), será este sábado en el Estadio Olímpico de Moscú que tendrá sus 35 mil asientos ocupados.

El ruso Gassiev ostenta los cinturones de súper campeón de la Asociación Mundial (AMB) y el de la Federación Internacional (FIB), mientras que el ucraniano Usyk es campeón del Consejo Mundial (CMB) y la Organización Mundial (OMB). El vencedor de esta pelea, ingresará al selecto grupo de campeones que han logrado unificar los cuatro principales cinturones de una división, como ya lo lograron los estadounidenses Bernard Hopkins (2004), Jermain Taylor (2005) y Terence Crawford (2017).

El combate de Gassiev- Usyk, en principio, había sido programado para el pasado 11 de mayo en Jeddah, Arabia Saudita, pero debió ser aplazado debido a una lesión menor en el codo izquierdo del ucraniano, durante una sesión de entrenamiento. La postergación, también determinó el cambio de sede pasando las acciones a la ciudad de Moscú.

El vencedor del sábado, además del Trofeo Muhammad Alí, obtendrá un cheque de $ 10 millones de dólares, que será la parte mayor del total de $ 25 millones que distribuye este certamen entre todos sus participantes: Yunier Dorticós y Mike Pérez de Cuba, Mairis Briedis de Lotenia, Marco Huck de Serbia, Krzysztof Wlodarczyk de Polonia y Dmitry Kudriashov de Rusia, que resultaron eliminados en combates anteriores.

Usyk, de 30 años y Medalla de Oro en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, derrotó en los cuartos de final por KO en 10 asaltos al serbio Marco Huck y en las semifinales derrotó por fallo mayoritario al letón Mairis Briedis. Gassiev, por su parte, venció por TKO en el tercer asalto, al polaco Krzysztof Wlodarczy y luego noqueó en el último round al cubano Yunier Dorticós, en la batalla de semifinales.

La batalla de este sábado, por sus expectativas, promete ser la pelea del año y el vencedor, sin duda alguna, aparecerá luego en la lista de los diez mejores Libra por Libra del planeta.

RIVALES CON MAS DIFERENCIAS QUE SIMILITUDES

El poder en la pegada parece ser el único atributo similar en sus capacidades boxísticas, en el resto hay notorias diferencias entre uno y otro. Algo que en lo previo le da mayor atractivo aún a esta pelea. Incluso las semejanzas de poder hasta pueden ser cuestionadas al momento de relacionarlas con la forma en que ese poder es utilizado por uno y otro.

Usik lo aplica en forma escalonada a partir de su mejor distancia e inteligencia táctica. Pega duro y de manera consistente pero de forma gradual. Gassiev es más determinante y contundente, es capaz de terminar sus peleas con un solo golpe sin importar si lo logra en plena presión o esperando la oportunidad desde una posición defensiva.

En los demás solo acumulan diferencias, empezando por sus guardias y el alcance de brazo: Gassiev es ortodoxo y mientras que Usyk es zurdo. Ambos tienen la misma altura (6.3), pero Usyk lo aventaja en alcance (78 a 76 pulgadas). Dos pulgadas no parecen ser una distancia excesiva, pero en este caso sí lo son y determinan hasta el tipo de pelea que veremos.

Usyk es muy efectivo con el golpeo a la zona media, excelente cuando lanza sus combinaciones de poder y en general muestra variedad de herramientas ofensivas para buscar el KO. Ha noqueado a seis de sus últimos ocho rivales, sin embargo su plan de pelea contempla todas las opciones. Si es necesario boxear, no duda en hacerlo. Eso le ocurrió en su última pelea contra Briedis al que derrotó de manera ajustada en doce asaltos. Si esta vez debe apelar a los mismos métodos, esas dos pulgadas en el brazo le permitirán crear su zona de confort defensivo y empezar su estrategia desde un territorio fuera del alcance de Gassiev.

El ruso no parece tener muchas opciones esta vez y lo obvio sería verlo sumar más momentos de presión que lo habitual tratando de acortar distancia para poder colocar sus mejores golpes desde una posición donde logre hacer daño. La mayor virtud es el poder en su mano derecha. Gassiev, quizás, sea el más peligroso púgil de la división en ese rubro, un solo golpe le basta para noquear o lastimar. Su estilo gira alrededor de esa virtud, es un boxeador práctico, de defensa hermética y que apuesta todo a ese golpe que destruye.

LAS INCOGNITAS SOBRE USYK

Oleksandr Usyk fue un jugador de fútbol hasta sus quince años (2002) cuando descubrió el boxeo iniciando una notoria carrera amateur. Al profesionalismo llegó recién en el 2013 y hoy suma 14 peleas en esa condición. Para sus 31 años, parecen pocas y nadie sabe si en algún momento le pasan la cuenta. Los trabajos que pasó para vencer a Mairis Briedis, tal vez, le esté dando la razón a los escépticos sobre el verdadero potencial de Usyk.

Pero hay otros factores ¿Quedarán vestigios de la lesión que impidió la pelea en Arabia? No lo sabemos, pero realizar este combate con una bolsa de tantos millones era prioridad para Usyk. No sería descabellado imaginar que por ese lado podría dar alguna ventaja. No sería el primero en esconder la gravedad de una lesión en circunstancias parecidas. Basta recordar a Manny Pacquiao cuando enfrentó a Floyd Mayweather.

A ello, debemos sumar un dato no menor asociado a cualquier posible efecto secundario de su lesión: Usyk está soportando una carga de acción muy elevada y en muy poco tiempo, cuarta pelea en 14 meses.

El ucraniano llega a este combate como favorito, sin embargo son esos factores que ponen en duda su favoritismo, máxime si tenemos en cuenta que deberá pelear en suelo ruso contra un ruso.

¿QUE PELEA VEREMOS?

Usyk es más inteligente desde lo técnico que Gassiev, tiene una buena defensa, sabe aprovechar sus oportunidades ofensivas colocando sus golpes en el momento adecuado y de manera precisa. Sin duda, eso hará este sábado. Trabajar la pelea desde el centro del ring, evitando la poderosa derecha de su rival, moviéndose de forma tal que sea su guardia zurda que le complique la presión a Gassiev, retrocediendo cuando este lo ataque y buscando castigarlo a la zona media para desgastarlo o tomarlo entrando con golpes directos a la barbilla.

La variedad de alternativas que el ucraniano puede desplegar, seguramente, lo habrán llevado a preparar un combate de doce asaltos. Es difícil imaginar que con su conjunto de habilidades, los jueces le eviten la victoria en las tarjetas.

Murat Gassiev – que se entrena en California bajo las órdenes de Abel Sánchez – siempre basa su estrategia en el poder de la pegada, encontrar ese límite exacto para castigar y destruir será siempre su objetivo. En ese plan lo más importante y trascendente es su paciencia: nunca pierde la calma y lee con mucha claridad al oponente, como una fiera al acecho. Así fue de menos a más para que la presión le permitiera llevarse una pelea difícil en las tarjetas contra Denis Lebedev, o liquidó en tres asaltos a Krzysztof Wlodarczyk con un gancho a la zona media o le regaló el centro del ring y el protagonismo a Yunier Dorticos para noquearlo en el último episodio.

Ante Usyk, seguramente, planteará una pelea similar a la que le dio la victoria contra el cubano. Le cederá primero la iniciativa al ucraniano, obligándolo a tomar riesgos y esperar un error o sorprenderlo con respuestas rápidas y contundentes.

Es un combate de muy difícil pronóstico. No obstante, las últimas peleas de ambos pueden servir de parámetro para lo que podría suceder este sábado. A Gassiev, desde una posición defensiva durante todo el combate, le bastó una izquierda poderosa para terminar con el cubano en el último asalto. Sin embargo, Usyk no lució tan dominante ante Breidis, pareció faltarle argumentos y estuvo cerca de sufrir un traspié.

De todas formas, el resultado de este sábado parece depender casi exclusivamente de la asimilación de cada uno. Gassiev recibirá buenos golpes antes de entrar a colocar los suyos y Usyk, necesariamente, será castigado en la zona media cada vez que tome riesgos y en algún momento también le llegarán los golpes más potentes del ruso ¿Resistirá? Todo depende eso.

Sin duda, en la pelea larga será difícil quitarle la victoria a Oleksandr Usyk, mientras que las mayores posibilidades de Murat Gassiev parecen resumirse a un desenlace por la vía rápida. Para todos, Usyk es el gran favorito. Prefiero ser más escéptico y colocar la balanza en el centro exacto (50-50), aunque por algunos gramos cayendo hacia el lado ruso. Esta pelea huele a KO y ya sabemos quién tiene la mano más pesada.