Vasiliy Lomachenko y José Pedraza unifican este sábado, en el Madison Square Garden de Nueva York, los títulos AMB y OMB del peso ligero. El ucraniano llega a esta batalla como amplio favorito y no es para menos. Es el mejor libra por libra del momento, un verdadero perfeccionista del boxeo de alto nivel y la figura sensación en la actual generación del pugilismo de primera línea.
El boricua José “Sniper” Pedraza, en la teoría previa, no debería poner en riesgos la victoria número doce de su encumbrado rival. Sin embargo, cualquier especulación sobre lo que pueda suceder en esta pelea hay que dividirla en dos partes: lo obvio y lo inesperado, las claves básicas y las claves ocultas.
Las primeras solo deben fundamentar la victoria sin discusión del ucraniano y las segundas dejan abierta la puerta para que pueda suceder cualquier cosa, hasta una derrota del favorito. Ambas son apenas hipótesis en la búsqueda de un pronóstico y de eso se trata este análisis. Conocer las posibilidades de ambos, descubrir las opciones intangibles y arriesgar un resultado.
LAS CLAVES BÁSICAS
VELOCIDAD: Se enfrentan dos rivales con un mismo estilo en el manejo de su dinámica, ambos son rápidos, tanto en los desplazamientos como en el golpeo con ambas manos. La diferencia aquí pasa por la administración de esa rapidez, en Lomachenko es vertiginosa y continua. En Pedraza sufre interrupciones y cuando la utiliza es previsible.
GOLPEO: Pese a ser hombres movedizos y habituados a trabajar en las tres distancias, los dos consiguen golpear de forma dura y suman combinaciones que lastiman al rival. La diferencia, no obstante, pasa por la forma. En Lomachenko el golpeo es abrumador y cambiante, con una efectividad superior a la media. Pedraza, por su parte, necesita primero tener el control del ring y un rival volcado a una postura totalmente defensiva.
Cuando eso ocurre, él puede trabajar sus combinaciones de poder con relativa efectividad. No obstante, este sábado, para lograrlo, necesita la permisividad de Lomachenko y es difícil en lo previo imaginar ese escenario.
PLAN DE PELEA: Lomachenko anuncia sorpresas en su estrategia de pelea y Pedraza asegura poseer un plan efectivo para anular el boxeo del ucraniano y derrotarlo. Si nos manejamos estrictamente por lo que hemos visto de ambos, en este rubro, las diferencias también son abismales. Lomachenko es un púgil en plena evolución táctica, un campeón que ha revolucionado los métodos de preparación y ha demostrado ser dueño de una increíble capacidad de lectura del rival.
Lo demostró en su última pelea, cuando Jorge Linares lo mandó a la lona en el sexto episodio y el ucraniano ajustó en la hora para sofocar el error, recuperar el dominio y destruir al venezolano que terminó como todos los rivales de Lomachenko: frustrado. De forma independiente a lo que quiera inventar Pedraza, no parece el boricua tener herramientas suficientes para romper el ajedrez perfecto de Lomachenko
LAS CLAVES OCULTAS
LA ACTITUD DE PEDRAZA: Cualquier rival que enfrente a Vasiliy Lomachenko deberá dominar totalmente su enfoque y fundamentalmente imponer su actitud. El ucraniano no solo domina a sus rivales desde lo boxístico, cuando los abruma y frustra con su golpeo, también lo hace desde su capacidad gestual al demostrar superioridad total sobre su oponente.
Ante Gervonta Davis, José Pedraza cayó avasallado por la personalidad boxística del rival y no tuvo reacción ni arrestos anímicos para buscar recuperarse en el terreno mental. Ante Lomachenko la duda mayor es que, una vez el ucraniano lo aturda con su boxeo, Pedraza se hunda en el mismo pozo de irresolución que padeció ante Gervonta.
EL HOMBRO AFECTADO DE LOMACHENKO: El ucraniano viene de pasar por el quirófano debido a una lesión en el hombro que sufrió en su última pelea ante Jorge Linares.
Al parecer no ha pasado el tiempo aconsejable para regresar al ring y ello es una duda razonable sobre las posibles consecuencias en el ring. El ucraniano ha dicho que sorprenderá a Pedraza con un cambio en su plan de pelea.
"Tenemos un pequeño secreto para esta pelea, voy a cambiar mi estrategia un poco, ya lo verán en el ring", dijo. No es descabellado imaginar que ese cambio sea consecuencia de la cirugía en el hombro y Lomachenko deba establecer un plan que le proteja de cualquier reacción negativa.
En ese aspecto, el ucraniano puede correr riesgos en la medida que Pedraza aproveche esa circunstancia o quizás el hombro se resiente en medio de la pelea. No es una certeza, pero sí una posibilidad.
¿QUÉ PELEA VEREMOS?
La primera certeza es que la batalla de este sábado será totalmente táctica. Los planes de pelea serán esenciales y no admitirán errores.
José Pedraza es rápido para soltar combinaciones con las dos manos, puede cambiar de postura, utiliza todo el cuadrilátero para desplazarse y defensivamente se cierra bien arriba. Cuando establece la postura de zurdo, suele ser muy peligroso con su gancho de derecha al cuerpo.
Ante Lomachenko es posible que repita el mismo plan que le permitió vencer a Ray Beltrán: mantenerse activo todo el tiempo, mucho cuerpeo, cambio de ángulos, golpear y salir como una constante, manteniendo la guardia alta y cerrada.
Pedraza es más alto que Lomachenko y lo supera largamente en alcance de brazo, por lo que se supone que, a lo reseñado, sumará jabeo y golpes largos. Sin embargo, es difícil que ello alcance para anular a su rival. Lomachenko es imprevisible en sus desplazamientos, tanto que logra frustrar a sus rivales con su increíble sincronización de golpeo y movimiento, ya sea desde cualquier ángulo o invadiendo por la calle central.
El ejemplo emblemático de ello, es su doble-doble golpe entrando, o sea castiga dos veces con el jab y luego dos veces con la mano atrasada.
Mi presunción es que veremos una pelea pareja en los primeros episodios. En ese tramo, hasta José Pedraza podría tener algo de protagonismo a partir del control del ring y la presión en ofensiva. Pero, una vez el ucraniano haga los ajustes y aumente el ritmo, empezarán los problemas.
Técnicamente el ucraniano es superior y esa superioridad crecerá asalto tras asalto.
La duda, no obstante, pasa por algún posible cambio en la administración de los tiempos de pelea por parte de Lomachenko. Viene de una lesión en el hombro, pasó por el quirófano y por ello es posible que esta pelea la trabaje con otro ritmo, otra disciplina y apueste por el combate largo para evitar exigir en demasía la zona afectada.
Precisamente, por ese detalle, la mayor posibilidad es que esta batalla termine con una victoria clara de Vasiliy Lomachenko en las tarjetas. Sin embargo, más que un posible KO, el pasado reciente nos enseñó que, en todas las peleas del ucraniano, la mayor opción es que el rival de turno se rinda, claudique, frustrado e impotente ante el boxeo superior y abrumador del mejor libra por libra del planeta.
No por un acaso la tendencia más popular en el mundo social del boxeo de alto vuelo es su clásica “No-Más-Chenko” ¿La repetirá contra Pedraza?