El motociclista chileno Pablo Quintanilla (Husqvarna) afirmó que "ganar el Dakar es difícil, pero no imposible" ante el reto de recortar en la última etapa el minuto y dos segundos al australiano Toby Price (KTM), el líder de la carrera.
"Cualquier cosa puede pasar. Hay que estar preparados para hacer esos 112 kilómetros con alta intensidad. Tengo que atacar al 120 % desde el inicio", dijo Quintanilla tras terminar la novena etapa, en la que no pudo recortar tiempo a Price porque salieron esta vez en líneas de diez motos.
"No había opciones de recortar. Es imposible cortar en dunas el tiempo a menos que haya un error de navegación. Veníamos los dos cada uno pendiente del otro. Toby venía con la misma estrategia, y vamos a ver qué pasa mañana", señaló.
Quintanilla reconoció que está muy contento de llegar a la última etapa del Dakar con opciones de ganar el rally y que la segunda posición le dejaría contento, pero aclaró que prefiere terminar primero.
"No pensé que los tiempos iban a ser tan ajustados, pero mi objetivo siempre era estar entre los primeros lugares. Estar en el podio era una excelente actuación para mí, pero no una sorpresa", valoró.
La novena y penúltima etapa de este Dakar que se disputa íntegramente en Perú tiene como a Pisco como punto de partida y llegada, con una distancia de 409 kilómetros, de los que 313 eran cronometrados.