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INDIANAPOLIS -- El partido del domingo contra su ex equipo podría ser la última vez que el mariscal de campo Peyton Manning juegue en el Lucas Oil Stadium, un edificio que ayudó a construir durante su carrera de 14 años en los Indianapolis Colts. Pero al igual que cuando Manning se despidió de la franquicia de los Colts en el 2012, el mariscal de campo de 39 años dejará su marca en Indianapolis mucho después de su retiro. "Cuando pones todo en conjunto, Peyton no sólo fue el rostro de la ciudad de Indianapolis o del estado de Indiana, fue el rostro de la NFL por mucho tiempo", declaró el alcalde de Indianapolis, Greg Ballard. "Pienso que después de su retiro, él pertenece aquí aunque las ciudades de New Orleans y Denver lo quieran reclamar también. El hospital infantil está aquí y aquí es donde lo adoramos". El retiro es una de cosas más lejanas en la mente de Manning. Su enfoque va estrictamente con ayudar a los invictos Broncos a mejorar a 8-0 y propinarle a los Colts su cuarta derrota consecutiva. "Cada semana, tratamos de estar más cómodos con los cambios aquí", sostuvo Manning. "Estamos, cada semana, concentrándonos para estar en la misma página y ajustar según nuestro rival semanal. Ese es prácticamente todo el enfoque. Hay demasiado por contemplar en esas dos posturas". El desempeño de Manning ayudó a los Broncos a dejar el viejo RCA Dome para irse al Lucas Oil Stadium. Con Manning como mariscal de campo, los Colts registraron marca de 141-67, viajaron 11 veces a playoffs y a dos Super Bowls. Fue liberado tras la temporada del 2011 e Indianapolis reclutó al mariscal de campo Andrew Luck con la primera selección global del 2012.  El apoyador Robert Mathis, el pateador de despeje Pat McAfee y el pateador de lugar Adam Vinatieri, son los únicos jugadores que quedan en la plantilla desde la época de Manning, un futuro Salón de la Fama de primera votación que recibió su último centro en Indianapolis durante la derrota de playoffs contra los New York Jets, el 8 de enero del 2011. "Recuerdo haber visto una entrevista que él hizo antes de unirse a los Colts, donde decía que le gustaría cambiar a los Colts para dejar de ser el equipo que ansiaban enfrentar otros, y hacerlo un contendiente regular", dijo McAfee. "Creo que logró moldear esta ciudad en una de las mejores ciudades deportivas del país. Tuvo una gran carrera aquí. Ayudó a transformar la ciudad para que no sólo fuera de baloncesto, sino de futbol americano. Siempre que un jugador grande si muda a otro equipo, siempre será recordado y por eso todavía vemos aficionados con su jersey y que lo apoyan". El domingo será apenas el segundo juego de Manning en Indianapolis como oponente, pero ha sido un visitante regular de la ciudad, acompañando a niños enfermos en el hospital que lleva su nombre: el Hospital Infantil Peyton Manning en St. Vincent. E incluso cuando Manning no puede visitar a los pacientes, levanta el teléfono para preguntar sobre ellos desde Denver. "Hubo una afirmación inmediata de Peyton (tras marcharse de Indianapolis en el 2012) que seguirá siendo su hospital y que quería seguir formando parte de él", dijo el jefe ejecutivo del St. Vincent, Jonathan Nalli. "Su compromiso no puede ser medido. Su compromiso se mantiene muy fuerte porque está a muchas millas en Denver, y es como si siguiera viviendo aquí cuando visita el Hospital Infantil Peyton Manning. "Piensas en Peyton Manning, e Indianapolis es uno de los primeros lugares en que piensas".
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