MÉXICO -- Los Miami Dolphins seguirán este año la misma receta que han intentado desde hace más de una década, convertirse en protagonistas de la NFL con un entrenador en jefe novato.
Miami anunció en enero la contratación de Adam Gase como su nuevo entrenador en jefe. Gase, sin experiencia previa en el puesto (como fue el caso de Nick Saban en el 2005, Cam Cameron en el 2007, Tony Sparano en el 2008 y Joe Philbin en el 2012), enfrenta la difícil tarea de echar a andar la ofensiva y descubrir si tiene la respuesta en la posición de mariscal de campo con Ryan Tannehill o tendrá que buscar en otro lugar.
Sin embargo, los problemas para Gase, reconocido por su excelente trabajo recientemente con las ofensivas de los Denver Broncos y Chicago Bears, van más allá de su pasador.
Miami perdió en la agencia libre a Lamar Miller, quien fue su corredor principal en el 2015, y tampoco cuenta con una verdadera amenaza que acompañe en el ataque aéreo al receptor abierto Jarvis Landry.
Con muchas interrogantes por resolver, Gase tratará de romper la sequía de playoffs en Miami que se remonta a la temporada del 2008, último año, también, en el que la franquicia tuvo un récord ganador.
LA ADICIÓN QUE MÁS AYUDARÁ SERÁ...
La llegada del apoyador Kiko Alonso, quien se perdió la mayor parte del 2015 por una lesión en la rodilla, debe dar solidez a una defensiva que se colocó en la posición N° 28 de la liga el año pasado al permitir 2,019 yardas.
Con Alonso apuntalando el centro de la defensiva junto al liniero estelar Ndamukong Suh, los Dolphins obligarán a los corredores rivales a pensarlo dos veces antes de aventurarse a cruzar por su camino.
La interrogante con Alonso es su salud, se perdió la temporada del 2014 con los Buffalo Bills y 2015 con los Philadelphia Eagles por lesiones, sin embargo, como novato en el 2013 acumuló 159 tacleadas combinadas.
Si bien es cierto que sus mejores años han quedado en el pasado, no podemos pasar por alto la adquisición del corredor veterano Arian Foster, quien puede tener un gran aporte para la ofensiva complementando a Jay Ajayi para tratar de revivir el ataque terrestre de los Dolphins.
LA BAJA QUE MÁS DOLERÁ SERÁ...
Miami decidió cortar al esquinero Brent Grimes por problemas fuera del campo y no precisamente del jugador.
La esposa de Grimes, Miko, se involucró en distintas batallas en redes sociales con jugadores y ejecutivos de los Dolphins, lo que generó cierta tensión entre el jugador y la franquicia, que más tarde trató de negociar una reestructuración de contrato con reducción salarial, oferta rechazada por el esquinero provocando su salida del club.
En tres años con los Dolphins, Grimes acumuló 13 intercepciones, un balón suelto forzado y dos touchdowns defensivos, así que su ausencia será notoria para una defensiva que permitió 4,000 yardas aéreas, ubicándose en la posición N° 25 de la liga.
DESDE LA ENFERMERÍA
Las lesiones están respetando a los Dolphins hasta el momento. El receptor abierto DeVante Parker está luchando con una lesión en el tendón de la corva que lo ha mantenido marginado de las prácticas en la última semana, sin embargo, no es nada de gravedad y se espera que esté de vuelta pronto en los entrenamientos.
El cazamariscales reinstalado recientemente de su suspensión de un año Dion Jordan fue colocado en la lista de jugadores con lesiones ajenas al fútbol americano (rodilla), pero se espera que se integre a las prácticas y compita por un lugar entre las alas defensivas del equipo con Mario Williams, Jason Jones, Andre Branch y Cameron Wake.
LA INTERROGANTE CLAVE
¿Se trata del último año que veremos a Ryan Tannehill como su mariscal de campo titular?
"Si uno se deja llevar por los indicios, todos apuntan que esta sería la última oportunidad para Ryan Tannehill, sobre todo ya van cuatro temporadas en las cuales no ha mostrado una verdadera evolución, en las primeras tres sí los números fueron mejorando, pero fueron números vacíos porque en el último cuarto y cuando más importaba en terceros intentos nunca ha dado la talla Ryan Tannehill. Se le acabaron las excusas esta temporada, uno pensaría teniendo en cuenta que ha llegado Adam Gase, un supuesto suspirador de mariscales que ha sacado lo mejor de Tim Tebow, que ha sacado lo mejor de Jay Cutler, que es uno de los más respetados por Peyton Manning a tal punto que se ha presentado al campo de entrenamiento de los Dolphins y siguen intercambiando mensajes de texto al día de hoy. Le van a dar más habilidad para cambiar jugadas en la línea de golpeo, el antiguo grupo de entrenadores no confiaba en él y por ende la ofensiva era muy cuadrada, bueno, esta vez se le acaban las excusas, sin embargo, más allá de que esta parecería ser en la superficie la última oportunidad para Ryan Tannehill, sinceramente yo lo dudo, el contrato también nos dice que sí debería serlo porque después de esta temporada que cobra 9 millones de dólares pasaría a cobrar 17, pero a fin de cuentas, nunca los Dolphins le han traído competencia y esa es la razón por la cual incluso si Tannehill llega a superar un poquito su productividad con respecto al año anterior probablemente se tenga que quedar un año más mientras desarrollas otro mariscal. Los Dolphins ya están tarde, nunca le trajeron competencia a Ryan Tannehill y eso es lo que me hace pensar que más allá de que este año no brille, probablemente se queda una campaña más en la ciudad de Miami", --Sebastián Martínez Christensen.
LA ESTADÍSTICA
Desde su último viaje a los playoffs en el 2008, los Dolphins acumulan una marca 49-63, sumando siete temporadas consecutivas sin récord ganador.
La última vez que los Dolphins tuvieron una ofensiva del top-10 en puntos anotados fue en el lejano 2001, así que Gase, quien dirigió el mejor ataque de la liga en el 2013 en Denver, tendrá un reto histórico.
PREDICCIÓN
Miami será uno de los beneficiados por la suspensión de cuatro partidos del mariscal de campo Tom Brady con los New England Patriots al viajar a Foxborough en la Semana 2, sin embargo, también visitan a los Seattle Seahawks y Cincinnati Bengals en las primeras cuatro semanas, lo que representa uno de los arranques más duros de la liga.
Los cruces con la AFC Norte y NFC Oeste tampoco parecen un escenario favorable para los Dolphins, sin embargo, confío en que encontrarán la manera de ganar partidos, sobre todo en sus duelos contra el resto de sus rivales divisionales, New York Jets y Buffalo Bills.
Es complicado pensar que Miami podrá revertir su mala racha este año, pero sin duda sentarán las bases para un gran futuro bajo la dirección de Gase con un récord 8-8.