Una demanda en contra de la NFL fue hecha este jueves por la cancelación del Juego del Salón de la Fama debido a las malas condiciones del terreno.
La demanda, que fue impuesta en Ohio, bajo la corte de distrito de Estados Unidos en Ohio, busca $5 millones de dólares en daños atribuidos a la NFL y al Salón de la Fama.
Alan Biland (from Wisconsin), Matthew Crabb (Indiana), Tiffany Ratcliff (Virginia), y Carmelo Treviso (Wisconsin) fueron los que iniciaron la demanda para tratar de recobrar “daños a ellos y otros en una situación similar”. Están representados por el abogado Michael Avenatti, quien representó a las personas que demandaron a la liga por los boletos del Super Bowl en 2011, los cuales fueron vendidos en asientos en un lugar temporal en el estadio de Dallas y que al final los sentaron en lugares sin vista al campo.
Los demandantes están buscando ir a juicio.
La demanda establece que la NFL tiene una “historia de malos manejos en los estadios donde tienen sus partidos”, citando el Super Bowl XLV en Dallas.
En aquella situación en 2011 en Dallas, varios aficionados que iban a ver el domingo el juego tuvieron que ser desplazados de sus asientos debido a que “una parte de las gradas estaba incompleta y lo que generaba una situación de inseguridad de acuerdo al departamento de Bomberos”.
La demanda asegura que el terreno del estadio del Salón de la Fama había causado problemas anteriormente y que esto causó una lesión que terminó con la carrera del pateador de los Pittsburgh Steelers Shaun Suisham en el juego de 2015.
Alega que el material que se puso en el campo el 5 de agosto para el concierto de Tim McGraw y luego el 6 del mismo para la inducción al Salón de la Fama se suponía que fuera removido del campo antes de las 8 am del domingo pero no fue quitado sino hasta las 2:45pm.
También alega que “inclusive sabiendo que el juego se iba a cancelar, los acusados continuaron con cierta normalidad para con el público en general”, incluyendo el reloj que decía cuánto tiempo faltaba para el inicio del juego. Debido a eso, los aficionados continuaron comprando comida y souvenirs mientras esperaban que el partido arrancara.
Los demandantes apuntaron que el ejecutivo de la NFL, Troy Vincent, envió un memo a los jugadores donde escribió: “Yo soy el responsable de que el terreno estuviera en las mejores condiciones”, y el dueño de los Colts, Jim Irsay comentó el domingo luego de que el juego fuera cancelado que la NFL debía “admitir su responsabilidad”.
El juego entre los Green Bay Packers y los Indianapolis Colts fue cancelado luego de que el terreno no estaba en condiciones para jugarse debido al material que se usa en pastos artificiales.
Avenatti le dijo a la Associated Press que el plan de los organizadores de reembolsar los precios de los boletos es una cantidad muy pequeña. Les dijo codiciosos y culpó a la NFL por lo sucedido y en menor medida al Salón de la Fama.
“Pudieron haber ofrecido a los aficionados el pago por las entradas y el reembolso por cualquier gasto que hayan incurrido” que sea comprobado. “La liga tiene un historial de ser coda con sus aficionados”.
La demanda al estadio de Dallas durante el Super Bowl se convirtió en una acción multimillonaria, pero no fue certificada y las reclamaciones fueron significativamente disminuidas. La mayoría de los demandantes sí recibieron alguna compensación, otros les fueron reemplazados los boletos para un Super Bowl en el futuro.