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La división Este de la Conferencia Nacional es una lotería

FILADELFIA -- Ah, la buena división Este de la NFC, donde arriba es abajo, el color negro es blanco y puedes canjear a tu quarterback titular una semana antes del debut y aun así verte en primer lugar cuando comienza el mes de octubre. Si, esos son los Philadelphia Eagles invictos y como punteros solitarios de su división tras tres semanas. Si, esos son los Washington Redskins, vigentes campeones divisionales, con una marca de 1-2 que solo fue posible gracias a la generosidad de Eli Manning.

En el medio vemos a los New York Giants y a los Dallas Cowboys, dos equipos que comenzaron el año con varios interrogantes importantes pero se las arreglaron para comenzar 2-1. Los Giants cuentan con el desempate entre ambos a su favor tras haber ganado por un punto en Dallas durante la primera semana, pero Dallas le ganó a Washington, Washington derrotó a los Giants y los Eagles todavía no han enfrentado a nadie en su división.

En otras palabras, como siempre parece suceder en esta división, nadie está seguro de nada. Los Eagles se ven fantásticos en este momento tras humillar a un favorito a llegar al Super Bowl como los Pittssburgh Steelers por 34-3 el domingo pasado. Ellos todavía no han perdido un partido o regalado el balón. En algún momento (probablemente el mismo día) ellos harán ambas cosas. No será esta semana, ya que están libres, pero a Carson Wentz y sus compañeros si se les vienen desafíos más exigentes todavía en el futuro cercano.

Cuatro de sus próximos cinco compromisos son fuera de casa, y su único partido de locales es contra Minnesota, otro invicto actualmente. Además, la segunda mitad del calendario de los Eagles llega con visitas a Seattle, Cincinnati y Baltimore de regalo. Agreguemos la inminente suspensión por 10 partidos del linero ofensivo Lane Johnson y esa combinación de factores nos dicen que es probable que los Eagles la van a pasar mal en algún momento. Lo cual está bien.

En Filadelfia se preparaban para un año de transición con su plantel y están tan perdidamente enamorados de Wentz, quien parece ser legítimo, como placenteramente sorprendidos de ir 3-0. Así que las cosas se ven bien para los Eagles en el futuro a largo plazo aún si su gran comienzo se desinfla, y el éxito tempranero es un factor importante. Sin embargo, las reglas claramente dicen que la división Este de la NFC debe contar con un campeón y al menos un representante en los playoffs esta temporada.

Si los Eagles no terminan siendo tan buenos como parecen ahora, la incógnita sobre quien se coronará está vigente.

Los Cowboys ya han ganado más partidos sin Tony Romo esta temporada que en 12 intentos durante la anterior. Los novatos Dak Prescott y Ezekiel Elliott están manteniendo a la ofensiva a flote y ellos solo escoltan a los Eagles en tiempo de posesión por partido, lo que significa que el plan de limitar la cantidad de minutos que su defensa diezmada pasa en la cancha está funcionando hasta ahora.

Se espera que Romo regrese a mitad de temporada, y su ausencia no parece ser tan devastadora durante esta campaña como en la anterior. Las visitas a Green Bay, Pittsburgh y Minnesota no se ven muy divertidas, pero existen razones para la esperanza en Dallas.

Los Giants acaban de tener su mejor mes de septiembre en cuatro años, pero dios mío…ellos sí que son indisciplinados. Regalaron el balón siete veces y solo lo han robado una vez mientras que cometieron 11 faltas para 128 yardas en la derrota del domingo contra Washington. Aquel hubiese sido un partido que los posicionaba como favoritos en la división e hundido a Washington en un hueco con una marca de 0-3. En vez de eso, ellos deben visitar Minnesota, Green Bay y Londres en octubre con preguntas legítimas sobre su arranque inspirado.

Los Giants tuvieron tres victorias y ocho derrotas en cotejos decididos por siete puntos o menos la temporada pasada, así que el estar 2-1 en ese rubro hasta ahora es alentador mientras cuentan con el mejor mariscal de campo de la división por lo menos hasta que Romo regrese (y posiblemente hasta después de eso). Sin embargo, las cosas se están por poner más difíciles, y los dirigidos por Ben McAdoo deben ajustar las cosas con apuro.

Mientras tanto, en la capital estadounidense, los campeones defensores de la división se preguntan si Kirk Cousins puede ser tan sólido como la temporada pasada y durante la segunda mitad del juego del domingo o si en verdad es el mariscal caótico de los primeros dos partidos y medio de la temporada. Cousins va a tener que ponerse a la ofensiva de los Redskins al hombro, ya que sus corredores no son productivos y ni siquiera parecen querer intentar serlo.

Los únicos dos equipos en la liga que promedian más yardas por aire son los Atlanta Falcons y los New Orleans Saints. Si Washington remonta, Cousins va a contar con las estadísticas necesarias para contar con la extensión multimillonaria de su contrato a largo plazo que los Redskins no le quisieron dar esta pretemporada.

Falta mucho camino por recorrer, pero lo único que sabemos en esta división es que no tenemos idea de lo que va a suceder. Consideremos que nadie ha repetido como campeón divisional en el Este de la NFC desde la campaña 2003-04 y que el monarca de esta solo ha ganado 10 juegos o más una vez en los últimos seis años.

Tú puedes decir que los Eagles están a un tercio del camino si quieres. Aún si ellos la ganan con el novato proveniente de la universidad de North Dakota State, eso no sería considerado una gran sorpresa. Sin embargo, la caja de sorpresas si que estará a pleno de aquí al final de la temporada regular en la alocada división Este de la NFC.