ALAMEDA, Calif. -- El dueño de los Raiders, Mark Davis, confirmó a ESPN.com el sábado que planea que su equipo juegue las próximas dos temporadas en el Coliseo de Oakland, incluso si la NFL le da luz verde para mudarse a Las Vegas.
“Queremos traer un título de Súper Tazón de regreso al Área de la Bahía”, dijo Davis a ESPN.com.
Davis y los Raiders tienen ya en orden un plan para financiar la construcción de un estadio de 1.9 billones de dólares en Las Vegas luego de que la legislatura estatal de Nevada aprobó el viernes un plan tributario para recaudar 750 millones de dólares para el proyecto.
Se espera que el lunes, el gobernador de Nevada, Brian Sandoval, firme el proyecto y se espera que Davis esté presente en el evento en Las Vegas. De ahí, el propietario del equipo negro y plata viajará a Houston para la reunión de dueños de la NFL el martes y miércoles y ahí actualizar a la Liga sobre el progreso del plan para el estadio de los Raiders, como lo harán Los Angeles Rams y los San Diego Chargers.
El siguiente paso se dará en enero, cuando Davis pedirá formalmente el permiso para reubicar a la franquicia al sur de Nevada. Para conseguirlo necesitará de 24 votos de los 32 dueños de equipos de la NFL.
Es por esta razón que Davis quería reafirmar su plan de que los Raiders jugarán en Oakland en 2017 y 2018 mientras se construye el estadio en Las Vegas. La franquicia negro y plata tiene opciones anuales para renovar su contrato con el Coliseo en esas campañas.
Un día antes de confirmar su compromiso de jugar en Oakland dos años más, Davis emitió un comunicado en relación a la aprobación del proyecto en Nevada para ayudar con el financimiento del estadio.
“Quisiera agradecer al gobernador Sndoval, al Comité de Infraestructura Turística del Sur de Nevada y a los miembros de la legislatura del estado en este histórico día”, dijo Davis. “Todas las partes han trabajado extremadamente duro para desarrollar y aprobar este tremendo proyecto para un estadio que servirá como orgulloso nuevo hogar para toda la Nación Raider”.