En una jornada dominical donde las actuaciones verdaderamente brillantes llegaron a cuentagotas, fue un novato quien se robó la posición de honor en nuestra columna semanal.
DAK PRESCOTT, QB, DALLAS COWBOYS
Los números no lo dicen todo, pero tampoco mienten.
El pasador de Dallas todavía no está a la altura del jugador al que está actualmente reemplazando en la alineación titular, Tony Romo, pero sus actuaciones semana a semana definitivamente han tornado cada vez más complicada la decisión de volver al veterano, cuando se recupere al 100 por ciento.
En la Semana 9, frente a los Browns, Prescott completó 21 de sus 27 intentos de pase para 247 yardas y tres touchdowns sin intercepciones, para liderar a los Cowboys a un registro de 7-1 y la cima de la Conferencia Nacional. Sí, se trata de los mismos Cowboys que culminaron la campaña pasada con marca de 4-12 y eligiendo cuartos en la primera ronda del draft, con Romo lastimado.
¿Cuánta diferencia hace un suplente de calidad en esta liga?
De acuerdo al Elias Sports Bureau, Prescott se convirtió este domingo en apenas el segundo jugador en la historia de la liga en lanzar para más de 2,000 yardas y 10 touchdowns, y sumar al menos cuatro anotaciones terrestres, en sus primeros ocho partidos como profesional, solamente después del Jugador Más Valioso reinante, Cam Newton.
Además, también de acuerdo a Elias, Prescott es el primer novato en la rica historia de Dallas en registrar más de un partido de al menos tres touchdowns por aire en su primera campaña.
Por si fuera poco, Prescott posee el Total QBR más alto para sus primeras ocho salidas como titular en la NFL desde el 2006, según ESPN Stats & Information.
No obstante, las cifras cuentan apenas parte de la historia. Hay cualidades que no logran cuantificarse con números.
Lo más notable de la actuación de esta jornada para Prescott fue su capacidad para levantarse de lo que había sido, probablemente, su peor salida. Ante los Philadelphia Eagles en la Semana 8, Prescott tiró tres feas intercepciones --de las cuales los Eagles sólo pudieron quedarse con una--, antes de rescatar una victoria clave en la carrera por la NFC East.
Esta semana, el producto de Mississippi State ofreció un juego casi perfecto de visita en el First Energy Stadium. Además, logró involucrar significativamente, por primera vez en lo que va del año, al objetivo preferido de Romo, Jason Witten, por si la decisión no era ya suficientemente complicada entre los pasadores de Dallas.
Una cosa es cierta: el problema de los Cowboys con sus pasadores es mucho mejor que el de otros equipos en la posición.
MENCIONES HONORÍFICAS
Drew, Brees, QB, New Orleans Saints. Cuando se habla de Brees, no se puede más que en pensar en grandes logros estadísticos. La Semana 9 ante los Niners no fue la excepción, Brees completó 28 de 39 pases para 323 yardas con tres touchdowns, sin intercepciones. De acuerdo al Elias Sports Bureau, se trató del partido N° 30 en su carrera en que lanza para al menos 300 yardas aéreas, tres touchdowns y cero intercepciones, extendiendo la marca de la liga que ya ostenta el producto de Purdue. ¿El segundo mejor? Tom Brady, con 26.
Melvin Gordon, RB, San Diego, Chargers. Como novato en el 2015, Gordon nunca alcanzó las 90 yardas terrestres en un juego, ni pudo anotar un solo touchdown. Este año, el corredor de los Chargers lleva tres juegos de al menos 100 yardas por tierra, y lidera a la NFL con 11 anotaciones terrestres. El compromiso de la Semana 9 ante los Titans fue su mejor desempeño hasta el momento, luego de acarrear el balón 32 veces para 192 yardas con tres touchdowns. En las tres instancias, fueron nuevas marcas personales para un corredor cuya flecha apunta claramente hacia arriba.
Latavius Murray, RB, Oakland Raiders. Enfrentando a los campeones defensores de la NFL --quienes cuentan con una defensiva que promediaba, antes de este partido, apenas 17 puntos permitidos por encuentro--, Murray contribuyó con 18 de los 30 totales de su equipo mediante tres touchdowns por tierra para pegarle a los campeones. Las 114 yardas por tierra de Murray también fueron parte de un total del equipo de 218, la mayor cantidad permitida por Denver desde el 2012. Lo más importante, sin embargo, fue que con el triunfo, los Raiders se colocaron en solitario en la cima de la AFC Oeste por encima de sus archirrivales.