FRISCO -- Wade Wilson recuerda al Dak Prescott de hace 53 semanas.
"El centro, nunca había hecho eso", dijo el entrenador de quarterbacks de los Dallas Cowboys. "Nunca había ordenado una jugada. Tenía los pies todos atrofiados. Nunca había pasado mucho tiempo bajo centro. Nunca. Rara vez dijo las palabras en la reunión previa a la jugada, o tenido alguna comunicación verbal real".
Luego de que terminó el minicampamento para novatos y antes del inicio de las actividades organizadas del equipo, Prescott realizó una promesa a Wilson.
"Nunca olvidaré esto mientras viva", dijo Wilson. "Dijo, 'Dame una semana y nunca podrás identificar que jugué exclusivamente en la formación escopeta y que nunca mandé una jugada'. Dijo, 'Lo voy a arreglar'".
¿Y?
"Una semana más tarde, lo estaba haciendo", admitió Wilson. "Sin duda".
Cuatro meses más tarde, Prescott era el mariscal de campo titular de los Cowboys luego de que Tony Romo sufriera una fractura de compresión en la espalda. Siete meses más tarde, había impuesto 19 marcas de novato del equipo para quarterback, incluyendo la mayor cantidad de pases de touchdown (23) y menor cantidad de intercepciones (cuatro). Lo más importante, empató un récord de la NFL en triunfos por un novato (13).
Nueve meses más tarde, Prescott fue nombrado el Novato Ofensivo del Año en la NFL.
Existen expectativas más altas para la segunda temporada de Prescott en el 2017, y los Cowboys lo apuestan todo. Cortaron a Romo, el líder de la franquicia en pases de touchdown, quien ahora es el principal analista de NFL para CBS. Se ha convertido en uno de los jugadores más populares de la NFL. Terminó segundo ante Ezekiel Elliott en venta de mercancías oficiales, de acuerdo a la NFL Players Association.
Hace dos semanas, firmó un acuerdo de patrocinio con Frito-Lay y Pepsi. Fue resaltado el domingo en el relanzamiento de E:60, de ESPN.
Pero justo como Romo encontró que el secreto está en la tierra, robando la frase de Ben Hogan, Prescott hallará lo mismo.
La meta es longevidad; no simplemente ser una maravilla de un sólo año.
"Creo que retomamos donde nos quedamos, y no es un mal inicio", dijo el coordinador ofensivo Scott Linehan. "Estábamos en un buen sitio conforme avanzó la campaña. El enfoque está en algunas de las cosas en las que no pudo participar el año pasado, que es una temporada baja completa. Algunas personas olvidan e incluso yo olvido que no estuvo aquí hasta el final de la segunda fase del programa de receso de temporada".
Los antecedentes de Linehan con mariscales de campo jóvenes son alentadores. Como novato en el 2009, Matthew Stafford tuvo 13 pases de touchdown contra 20 intercepciones. Su segunda campaña fue abreviada tras tres encuentros por una lesión de hombro, pero lanzó seis touchdowns y una intercepción. En su primera campaña completa, sumó 41 pases de touchdown y 16 intercepciones en el 2011.
Linehan fue el coordinador de Daunte Culpepper con los Minnesota Vikings. En su primer año juntos, Culpepper acumuló 18 pases de touchdown y 23 intercepciones. La siguiente campaña, tuvo 25 pases de touchdown y 11 intercepciones. En su tercera campaña juntos, sumó 39 pases de touchdown pases y 11 intercepciones, liderando a la liga con 4,717 yardas.
"No quieres excederte en acelerar el proceso", dijo Linehan. "Estamos en el proceso ahora. Estamos en el segundo año de un joven mariscal de campo, y nos ha mostrado todo lo que queremos ver en su primer año. Obviamente queremos ver que levante el estándar este año, y comenzar a hacer las cosas tan bien y hacer algunas de las mismas cosas, mejor".
En el minicampamento para novatos del año pasado, el vicepresidente ejecutivo Stephen Jones notó algunas de las mismas cosas que mencionó Wilson, desde el extraño trabajo de pies hasta su poca familiaridad recibiendo el centro. Pero también notó que el recluta de cuarta ronda rápidamente se convirtió en el líder de la generación.
"En este momento del año pasado fue cuando empezamos a ver que teníamos a alguien único en términos de su factor 'eso', sus habilidades de liderazgo", explicó Jones. "Empezabas a decir, 'Vaya, hay algo acerca de él'. Ahora, no sabíamos que iba a ser Dak, pero pensamos, 'Hombre, está empezando a mostrar algunas cualidades aquí en términos de ética de trabajo, con Scott, el modo en que interactuó con los jugadores en el gimnasio'. Allí es cuando empezabas a decir, 'Oh, me empieza a gustar esto'".
Nadie sabía que sería tan exitoso en el 2016. Quizás Prescott sí, pero la idea entrando al campamento de entrenamiento era que sería el tercer pasador detrás de Romo y Kellen Moore. Cuando Moore quedó lastimado, los Cowboys intentaron encontrar a un reemplazo veterano, pero eventualmente quedaron convencidos de que Prescott podía ser el N° 2.
Luego Romo quedó lastimado y Prescott se convirtió en elegido de Pro Bowl.
A inicios de la pasada temporada baja, Prescott pasó tiempo en Orlando, realizando los mismos entrenamientos previos al draft que realizó hace un año. Estuvo entre los que se aparecieron anticipadamente en The Star antes del inicio del programa de temporada baja, y no se ha perdido un día de trabajo voluntario.
Wilson dijo que los Cowboys deseaban dar a Prescott más libertad dentro de la ofensiva, ejecutando algo más que sólo las jugadas que le mandan. Los líderes del equipo, Jason Witten y Sean Lee, desean que Prescott tenga un rol mayor y una voz más sonora en el vestidor.
"Es incansable", dijo Jones. "Significa mucho para él. Es una gran prioridad para él obviamente ser un grande. Creo que todo está frente a él. Cada año será mejor".