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Presión sobre GM de Giants para resolver contrato de Beckham

EAST RUTHERFORD, N.J. -- No fue hace mucho tiempo, tras una tercera temporada consecutiva con un récord perdedor, que este mensaje fue enviado al gerente general de los New York Giants, Jerry Reese, de parte del dueño del equipo, John Mara.

"Jerry sabe que esto recae sobre él", dijo Mara tras la conferencia de prensa en enero de 2016 para culminar la temporada.

Lo mismo podría ser cierto ahora entrando al verano de 2017, aunque por razones diferentes. Reese ha logrado enderezar a los Giants a través de movidas en la agencia libre y selecciones en el draft. Terminaron la pasada temporada con marca de 11-5 y llegaron a los playoffs. Los Giants hasta son considerados por algunos como contendores para el Super Bowl esta temporada.

Aplausos para Reese en un buen trabajo en ese renglón. Ahora viene la otra parte en la cual la asignación es, digamos, compleja y extremadamente delicada.

El tema más importante que los Giants enfrentan este verano y hacia el futuro es el manejo de su ala abierta titular Odell Beckham Jr. y su contrato. Beckham se convirtió en elegible para un nuevo contrato esta temporada muerta por primera vez en su carrera y las conversaciones ni siquiera han comenzado a pesar de sus tres temporadas estableciendo marcas en el terreno de juego. Esto es un punto neurálgico ahora que Beckham ha regreswado a los Giants esta semana para el minicampamento mandatorio tras optar por no participar en las otras actividades voluntarias organizadas por el equipo.

Lo que no se puede perder de vista en este caso es que Aaron Donald, de los Los Angeles Rams, está en la posición contractual de Beckham -- extremadamente falto de paga entrando en su cuarta temporada con una opción del equipo para un quinto año en el horizonte -- y los Rams y Donald ya han hablado sobre un nuevo contrato. El mejor amigo de Beckham, Jarvis Landry, también está entrando a su cuarta temporada con los Miami Dolphins. El también fue parte de la clase de seleccionados en el draft de 2014 y los Dolphins, según se ha reportado, también han dialogado con sus representantes sobre un nuevo contrato.

Mientras tanto, Beckham -- aunque bajo circunstancias un poco distintas dada su extraordinaria producción, inmenso estrellato y reconocida personalidad -- no ha sabido nada sobre un nuevo contrato más allá de que Mara se los mencionó a un grupo de abonados en uno de los eventos de los Giants con los fanáticos.

El dueño de los Giants dijo públicamente que el equipo quiere a Beckham por el resto de su carrera, pero el gerente general a cargo de la negociación desde el punto de vista de negociación ha hecho nada para probar que esto está en el futuro inmediato.

Esto no ha sido bien recibido. Parte de la razón por la cual Beckham no partició en los OTAs en la primavera fue por su contrato, según fuentes dijeron a Adam Schefter, de ESPN. Nada de lo que yo he escuchado de Beckham, personas cercanas a la superestrella o de los Giants indica algo distinto a ese reporte. Se hizo más evidente el martes que el contrato fue un factor, dado que Beckham fue elusivo cuando se le preguntó si el contrato en efecto fue la razón por su ausencia de los OTAs.

"Probablemente tendrás que preguntarle a las personas encargadas de hacer los contratos y cosas como esas", dijo Beckham en la primera de tres ocasiones que se le hizo la pregunta. "No te podría decir".

¿Que no sabe el por qué no fue a los OTAs? ¿En verdad? ¿Sólo el agente de Beckham y Reese?

No fue un accidente de que los 11 minutos y 30 segundos en el podio el martes incluyeron 11 usos de alguno forma de la palabra "crecer" y cero con la palabra "voluntario". Reese fue el que se paró en el podio al culminar la temporada y dijo que su receptor estrella tenía que pasar por una introspección seria tras la manera en que concluyó el año con una viaje de bote en Miami, un mal juego contra los Green Bay Packers y un hueco en el camerino visitante en el Lambeau Field.

"Esto es lo que yo veo: Veo a un tipo que necesita pensar sobre algunas de las cosas que hace", dijo Reese en aquel momento. "Todo el mundo sabe que él es un jugador talentoso, pero hay algunas cosas que ha hecho que tiene que mirarse en el espejo y ser honesto hacia él mismo sobre ello, y pienso que hará eso. Le ayudaremos con eso, pero el se tiene que ayudar a él mismo, y creemos que hará eso. Es un jugador inteligente, pero a veces no hace lo que es inteligente".

No es que Reese estaba equivocado. La mayoría probablemente estaría de acuerdo con esa percepción. Beckham ha sido víctima de sus propias acciones, lo que podría ser una razón por la cual los Giants no están listo para soltar un camión lleno de dinero a su hogar en Hollywood.

Ahora está en manos del gerente general el mantener las relaciones con su receptor estrella cordiales. Los comentarios de Reese y sus subsiguientes acciones (el ni siquiera abrir las negociaciones para apasiguar a su estrella más grande) deja abierta la posibilidad de la relación se está agriando, aún si Beckham dijo el martes que nada había cambiado.

"La misma", dijo Beckham sobre su relación con Reese. "El crecimiento es algo que ocurre a través de toda una vida. Si uno deja de crecer, entonces uno deja de progresar en la vida, así que todos podemos crecer todos los días".

Esa fue uno de los 11 usos de "crecer" o un derivado. De nuevo, no fue un accidente. Fue un mensaje directo al gerente general y la organización de los Giants.

Esto tiene todos los ingredientes de una situación que, si no se maneja adecuadamente, puede tornarse contenciosa. La presión está ahora sobre Reese, quien no es exactamente conocido en la liga por ser un gran comunicador. El permite que el asistente del gerente general, Kevin Abrams, haga la mayoría de las conversaciones y negociaciones con los agentes. Muchos de los agentes ni siquieran han escuchado de Reese sobre sus clientes.

Esto tiene que ser diferente. Beckham no es ni Shaun Draughn ni Keenan Robinson. El es el mejor jugador y la estrella más grande del equipo. Tiene 24 años, y en el caso de su contrato, tiene que ser manejado de forma especial. Tiene que ser acomodado y que lo mantengan contento más temprano que tarde porque su única posición de poder es crear dolores de cabeza para los Giants.

Esta es la primera prioridad para Reese este verano, y quizás más allá. Tiene que entender que los Giants no pueden darle largas al asunto, y las acciones hablan más claro que las palabras en esta instancia.

Todavía hay tiempo. No es demasiado tarde. Muchas cosas pueden ocurrir entre ahora y el comienzo de la temporada, o entre ahora y la próxima temporada. Pero esto si es seguro: Esto recae sobre tí otra vez Jerry, el asegurar que esta relación no se convierta en una agria.