La pregunta de hoy: ¿Podrá el quarterback de los New York Giants, Eli Manning, volver a ser productivo o fue la temporada pasada el comienzo de su declive?
Todd Archer, reportero de los Dallas Cowboys: Manning tiene 36 años, así que uno tiene que contemplar si la edad ya lo está alcanzando. No ha disfrutado de las mejores líneas ofensivas ni de un buen juego por tierra. Suelta el balón relativamente rápido, así que no recibe muchos golpes, pero está propenso que lo noqueen de vez en cuando. Tras lanzar 35 pases para touchdown, una nueva marca personal, en el 2015, yo me sorprendí con que solo lanzó 26 en el 2016 con 16 intercepciones.
Para mí, siempre ha sido un quarterback que pierde la concentración y toma decisiones alocadas (piensen en el partido inaugural de 2015 contra los Cowboys cuando debió de sencillamente tomar una captura).
En su segundo año como entrenador en jefe, quizás Ben McAdoo podrá ayudar a Manning más porque entiende ahora todo lo que viene. Brandon Marshall deberá ayudar a Manning también. Esa fue una de las mejores movidas de la temporada de 2016, en mi opinión. Si Manning no mejora este año, se sabe que habrá pedidos de la fanaticada en el MetLife Stadium por Davis Webb.
Tim McManus, reportero de los Philadelphia Eagles: Manning es uno de los quarterbacks más peculiares de la era moderna. Es un dos veces Jugador Más Valioso del Super Bowl y se puede argumentar que está en el proceso de construir un caso para el Salón de la Fama, pero pasa por rachas -- a veces largas -- cuando juega como un quarterback mediocre. Es difícil predecir cómo un jugador enigmático como él jugará de año a año.
Con eso dicho, cuando miramos el cuadro grande, vemos a un equipo de los Giants que ha promediado ocho victorias en las últimas cinco temporadas con apenas una aparición en la postemporada. Ha pasado algo de tiempo desde aquella aparición sorprendente en el Super Bowl en el 2011, cuando Manning demostró algo de la magia Manning. Probablemente le queda algo del polvo mágico en sus trucos, pero a los 36 años, es razonable sugerir que ya su carrera va cuesta abajo.
John Keim, reportero de los Washington Redskins: El problema con Manning es que ha tenido años malos en el pasado. En el 2012 y 2013 se combinó para 44 touchdowns contra 42 intercepciones. Entonces se recuperó en las próximas dos temporadas para lanzar 65 touchdowns contra 28 intercepciones.
Así que es difícil saber si el año pasado se trató de que cumplió 35 años o si fue otro típico año malo de Manning.
Sí se que tuvo uno de sus peores años lanzando profundo desde el 2008; la temporada pasada Manning completó apenas el 29.6 por ciento de sus pases de 20 yardas o más.
Aún con eso, no creo que se vio como un quarterback que está acabado. Y con el receptor Brandon Marshall y el ala cerrada Evan Engram uniéndose a las alas abiertas Odell Beckham Jr. y Sterling Shepard, los Giants ahora tienen más armas para Manning. Le permitirá tener un buen año. La pregunta en realidad se convierte: ¿Cuán bueno será su año?