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Hubo momentos de la temporada pasada en que Sam Bradford lució como el mariscal de campo del futuro de los Minnesota Vikings, mientras el panorama de Teddy Bridgewater permanecía nublado a causa de su severa lesión de rodilla. Pero Bridgewater se está rehabilitando, y ahora Bradford se dirige a una campaña de contrato. Los reporteros de la NFC Norte para ESPN opinan sobre qué deben hacer los Vikings en la posición más importante del campo.  Rob Demovsky, reportero de los Green Bay Packers: Deben tomar la ruta de Kirk Cousins con Bradford y pagarle un año a la vez. Incluso si eso significa emplear la designación de jugador franquicia y entregarle 24 millones de dólares por una campaña, así sea. En este punto, necesitan tanto tiempo como les sea posible para descifrar si Bridgewater puede recuperar su forma. Para este momento del año que viene, tendrán una mejor idea de ello. El punto es que necesitan retener a ambos quarterbacks por al menos una temporada más después del 2017. Jeff Dickerson, reportero de los Chicago Bears: Lo veo como dos temas separados. El contrato de Bradford no debe estar vinculado a la recuperación de Bridgewater. Yo esperaría respecto a una extensión a largo plazo para Bradford. Dejarlo jugar la siguiente temporada y luego reevaluar. No olviden --aunque no es lo ideal-- los Vikings pueden aplicarle la designación de jugador franquicia en el 2018. Bradford tuvo buenos números el año pasado (3,877 yardas aéreas, 20 touchdowns y cinco intercepciones), pero sigo sin verlo como un quarterback del Top-15. Por eso no siento que haya prisa para retenerlo más allá del 2017. Y si Bradford juega bien y lidera a Minnesota hasta los playoffs, los Vikings le pagarán con gusto. Pero Bradford no cuenta con mucha palanca para negociar, por ahora. Por lo que respecta a Bridgewater, los Vikings no pueden contar con él. Odio decirlo porque realmente me gustaba Bridgewater antes de que se lesionara, pero Minnesota debe seguir delante en la posición de quarterback. Asumir lo peor y esperar lo mejor. Michael Rothstein, reportero de los Detroit Lions: En resumen, no. Aunque el ex recluta N° global ha mostrado mayor estabilidad en los años pasados y consiguió el mejor porcentaje de pases completos en la NFL la temporada pasada, es difícil confiar en él a largo plazo. No ha jugado los 16 partidos de una campaña regular desde el 2012 y todavía no registra una campaña de 4,000 yardas. Bradford es un quarterback de la NFL promedio, pero con Bridgewater, los Vikings tenían algo potencialmente especial. La durabilidad sigue siendo un riesgo con Bridgewater mientras se rehabilita de una catastrófica lesión de rodilla, pero era un jugador en ascenso, y si es capaz de volver, tiene el potencial de ser especial. Si Bradford estuviera dispuesto a firmar una extensión a corto plazo antes de la campaña --una o dos temporadas más-- los Vikings serían inteligentes en aceptar y después ver cómo Bridgewater progresa a lo largo de la campaña. Pero es una situación interesante para Minnesota porque cuenta con dos mariscales de campo titulares en su plantilla. Dependiendo del modo en que lidien con eso los Vikings, siempre existe la posibilidad de que se queden con ninguno en este momento del año que viene.
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