INDIANAPOLIS -- La presencia física de Andrew Luck no se ha sentido en el terreno de juego en más de siete meses. Pero su presencia emocional y mental se puede sentir a través de la organización mientras continúa la rehabilitación de su hombro derecho.
Luck acude con regularidad a los meetings del equipo y también a reuniones individuales de su posición mientras intenta reducir el lapso de trabajo que necesita para salir de la lista de jugadores imposibilitados para jugar y regresar a entrenar.
"Hace todo lo que los demás hacen", dijo el coordinador ofensivo de los Colts, Rob Chudzinski.
Hablar con sus compañeros sobre distintas situaciones es, sobre todo, lo que Luck puede hacer mientras está fuera de actividad. Se la ha visto en el campo de prácticas en sólo dos de los primeros nueve días de training camp del equipo. Estaba animado y completamente involucrado.
"No lo hemos visto en un tiempo", bromeó el coach Chuck Pagano a inicios de semana. "Si esto fuera la universidad, pensaríamos que ya lo transfirieron. Es increíble tenerlo aquí, son otros ojos, otro coach en el campo. Y también es bueno para su alma".
Es dentro de las instalaciones donde Luck está involucrado frecuentemente -- y no siempre con comentarios positivos. T. Y. Hilton dijo que Luck, un perfeccionista, dejará las reuniones de quarterbacks para hablar con los receptores en sus reuniones.
"Nos hace saber si lo estamos haciendo mal o bien", dijo Hilton. "Si corres la ruta equivocada, (te dirá), 'necesito que estés en este lugar'. Asegurándose de que estamos en las posiciones correctas".
Luck está en la sala de meetings con sus compañeros de equipo cuando no está en el sala de videos, viendo el material de temporadas anteriores y analizando diferentes escenarios defensivos.
Viene de una temporada en la que completó el 63.5 por ciento de sus pases y que jugó completa con el hombro lesionado, lo que lo llevó al reporte de jugadores en práctica limitada al menos un día cada semana.
La gran pregunta, no relacionada con la salud de Luck, es con la línea ofensiva y si ese grupo es capaz de mantener al quarterback franquicia en el terreno de juego sin ser constantemente golpeado, como lo ha sido a lo largo de su carrera. Los Colts concedieron 44 capturas y 128 golpes para su quarterback la temporada pasada. Es la primera vez en la era de Luck que los Colts regresan al núcleo ofensivo principal de la temporada anterior.
"Andrew no es el tipo de chico que va a tomar el asiento trasero sólo porque no está jugando", dijo el tackle izquierdo Anthony Castonzo. "Todavía conserva un rol. Observa los videos de cada práctica. Viene (con la línea ofensiva) con cosas diferentes, preguntándonos qué pensamos de distintos escenarios, lo que él piensa de otros. Está pensando constantemente a pesar de que no está practicando. No podríamos esperar otra cosa de él".