FRISCO, Texas -- Mientras Tony Romo se acercaba al podio el 15 de noviembre de 2016 nadie sabía qué era lo que iba a decir. Nadie en la gerencia de los Dallas Cowboys. Tampoco el entrenador Jason Garrett ni sus compañeros de equipo.
"Se siente como si fuera a year", dijo Romo en forma de chiste en la conferencia de prensa, sabiendo que no había hablado en público desde su fractura de compresión en la pretemporada contra los Seattle Seahawks.
Tomó un sorbo de agua, declinó un intento de in reportero de hacer una pregunta y procedió a leer un discurso que había redactado que lo llevó a uno de los mejores momentos de su carrera y ayudó a definir el éxito de los Cowboys en el 2016.
Cuando Romo se lesionó, la presunción era que regresaría a su puesto de titular, pero entonces los Cowboys ganaron ocho de sus primeros nueve partidos. En vez, el novado Dak Prescott jugó mejor que nadia habría esperado. Dos días antes, Prescott se había enfrentado a Ben Roethlisberger y sus dos victorias de Super Bowl, lanzando para 319 yardas en una victoria de los Cowboys por 35-30 sobre los Pittsburgh Steelers en Heinz Field.
A Romo se le había informado que el equipo mantendría a Prescott como titular.
Estaba molesto, frustrado y decepcionado, pero en vez de potencialmente romper el equipo, Romo se allanó y por seis minutos pronunció un discurso emotivo que acabó definiéndolo tanto como su remontadas de cuarto final y las derrotas en los playoffs.
"Yo pienso que él no necesitaba hacerlo, pero habla mucho sobre quién es como persona que lo hizo", dijo el profundo defensivo Byron Jones. "Una persona increíblemente generosa que demostró lo que hizo al permitir que Dak continuara como titular por el resto de esa temporada. Recuerdo algunas cosas sobre el discurso, pero él básicamente dijo que Dak se había ganado el pueso. Para una persona que ha estado jugando por 14 años y jugar en un muy alto nivel, eso difícil decir y hacer. Eso toma mucho valor".
Romo redactó su discurso mayormente solo la noche anterior. Un amigo cercano lo ayudó a editarlo, jugando con algunas frases, pero el mensaje de Romo no cambió:
"El decir que la primera mitad de la temporada ha sido emotivo no le hace justicia a la realidad. El lesionarme cuando uno se siente que tiene el mejor equipo que jamás uno pudo haber tenido al frente fue un momento que quebró mi alma. Entonces que me digan que no serían de tres a cuatro semanas, sino 10 semanas que estaría fuera fue otro golpe. Y a través de eso, uno carga con un increíble sentido de culpabilidad por haber decepcionado a compañeros de equipo, a los fanáticos y a la organización. Después de todo, ellos estaban contando conmigo para traer un campeonato. Eso es lo que los quarterbacks se supone que hagan: así es como son juzgados. Yo adoraba eso. Todavía lo adoro. Pero aquí está uno, lesionado sin ninguna habilidad real de ayudar a mis compañeros ganar sobre el terreno. Es ahí cuando uno está obligado a enfrentar lo que está pasando.
"Las temporadas pasan. Los partidos van ganando importancia. Las oportunidades de éxito se disminuyen. Tu potencial suceso ha llegado. Lesionado por dos años consecutivos y ahora a mediados de los 30. La prensa está murmurando. Todo el mundo tiene dudas. Uno ha gastado toda una carrera trabajando para llegar aquí. Y ahora tenemos que comenzar de nuevo. Uno casi se siente como un extraño. Los entrenadores entienden, pero tienen que seguir entrneado, y uno no está. Es un lugar oscuro. Probablemente el lugar más oscuro que jamás haya visitado. Uno está triste y fuera y uno se pregunta, '¿Por qué me ocurrió esto?' Es en este momento en el cual uno se da cuenta de qui[en uno es y de lo que uno se trata.
"Uno ve el futbol americano como una meritocracia. No te dan nada. Uno se gana todo, todos los días, una y otra vez. Uno tiene que probarse. Y esa es la manera en que las cosas son en la NFL, como funciona el futbol americano".
Romo quería jugar, pero dijo que "algo mágico está ocurriendo con nuestro equipo".
"Él se ha ganado el derecho de ser nuestro quarterback", dijo Romo sobre Prescott.
Prescott no sabía que Romo iba a dar ese discurso, pero Romo lo llevó a un lado y le repitió lo que había dicho públicamente. Prescott eventualmente leyó el discurso en Twitter.
"No sé si afectó nuestro vuestuario de una manera o de otra", dijo Prescott. "Todo sabemos cuan grade es Tony y la manera en la cual lidió con la situación el año pasadoñ no hay forma de agradecerle lo sufiencie, la organización no puede agradecerle sufienciente. Fue chévere. Era importante que él hiciera eso, pero nunca tuvimos ningún problema".
Al igual que Prescott, mucho compañeros vieron la repetición del discurso en sus teléfonos.
"Yo pienso que lo manejó increíblemente bien", dijo el linebacker Sean Lee. "Fue una situación difícil. Él era un tipo que era un quarterback elite, lidiando con lesiones, desgraciadamente. Pero aún así venía a las prácticas. Si uno lo miraba, seguía siendo Tony Romo haciendo jugadas. Aún podía jugar, así que sé que fue difícil para él porque obviamente se sentía que aún podía hacer las jugadas de distintas maneras.
Romo terminaría jugando en solo una serie ofensiva la temporada pasada, en la Semana 17 contra los Philadelphia Eagles, completando tres de cuatro pases, incluyendo un touchdown de tres yardas a Terrance Williams.
Meses más tarde, Romo fue puesto en libertad por los Cowboys y se unió al equipo de CBS como su analista de futboll americano. Su trabajo al ladode Jim Nantz en lo que va de esta temporada ha sido aclamado por casi todo el mundo.
"Tony es una gran persona. Por todo su talento como jugador, es sencillamente una gran persona también", dijo Garrett.