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Este lunes el futuro de los Philadelphia Eagles en el 2017 se nubló dramáticamente tras darse a conocer que el mariscal de campo titular Carson Wentz se perderá el resto de la temporada tras confirmarse que sufrió una rotura de ligamento cruzado anterior en la rodilla izquierda. La baja de Wentz es un duro golpe para las aspiraciones de campeonato de Philadelphia, que tiene la mejor marca de la liga (11-2) junto a los Pittsburgh Steelers.  Esta situación se reflejó inmediatamente en las casas de apuestas de Las Vegas que redujeron las posibilidades de Philadelphia para llegar al Super Bowl. Los Eagles llegaron su partido de la Semana 14 contra Los Angeles Rams como cofavoritos para ganar la conferencia y estaban empatados en el tercer lugar para ganar el campeonato de la NFL, en ambas categorías empatados con los Minnesota Vikings. Ahora, Philadelphia está en el tercer lugar en la lista de favoritos para ganar la NFC, detrás de Vikings y New Orleans Saints, mientras que sus probabilidades para ganar el campeonato cayeron al quinto puesto donde empatan con los Rams. Wentz, quien lideraba la votación para el Pro Bowl esta temporada, estaba en el segundo puesto en la lista de probabilidades para ganar el premio al Jugador Más Valioso de la NFL con 7-4 en el William Hill de Las Vegas. El primer puesto pertenece a Tom Brady con 8-11, mientras Russell Wilson con 11-2 y Drew Brees con 14-1 aparecían detrás de Wentz. Con su victoria sobre los Rams, Wentz mejoró a 11-2 como titular. sin embargo, de acuerdo a Elias Sports Bureau, se convertirá en el tercer mariscal de campo en la era del Super Bowl que gana al menos 11 partidos y no disputa un solo partido de playoffs ese año, uniéndose a Phil Sims que lo hizo en 1990 con los New York Giants, que terminaron ganando el Super Bowl XXV con Jeff Hostetler, y Derek Carr con los Oakland Raiders en el 2016 cuando se fracturó la pierna en temporada regular y fue reemplazado por Connor Cook. En ausencia de Wentz, los Eagles depositarán todas sus esperanzas en el reserva Nick Foles, sin embargo, la diferencia entre ambos pasadores es enorme. Lanzando bajo presión, Wentz completó el 43 por ciento de sus pases con ocho touchdowns sin intercepciones este año, promediando 6.4 yardas por cada intento, mientras que Foles ha completado el 37 por ciento de sus envíos en esa situación a lo largo de su carrera con siete touchdowns por nueve intercepciones y un promedio de 5 yardas por intento. La ofensiva de Philadelphia podría recaer en las piernas de sus corredores en ausencia de Wentz al estar colocado en el top-5 de la liga en tres importantes categorías. Los Eagles tienen el segundo mejor ataque en yardas terrestres por partido con 143; sus 4.6 yardas por acareo son la cuarta mejor cifra de la NFL y sus yardas después del contacto son la segunda mayor cantidad con 2.2 en promedio. El éxito de Philadelphia este año se debió también, en gran medida, a la mejoría de Wentz en terceras oportunidades respecto a la temporada pasada. Esta campaña el diferencial de touchdowns e intercepciones de Wentz mejoró a 14-3 luego de terminar 3-5 en el 2016, también se elevó su porcentaje de pases completos al 65 por ciento (56 por ciento el año pasado), lo que se reflejó en su índice total de pasador que mejoró de 27 a 91. Hasta antes de su lesión, Wentz lideraba la NFL con un índice total de pasador de 75, seguido por Case Keenum con 72 y Brady con 71. Deshaun Watson, quien también se lesionó el ligamento cruzado anterior, era el líder de la liga con un índice total de pasador de 82 antes de quedar fuera por el resto de la temporada. Información de ESPN Stats & Information fue utilizada en la redacción de esta nota.
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