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HOUSTON -- Con la derrota 26-16 del domingo ante los San Francisco 49ers, los Houston Texans se colocaron con marca 4-9, asegurando su primera temporada perdedora bajo la dirección de Bill O'Brien, quien tiene un año restante en su contrato por cinco campañas que firmó cuando asumió el cargo de entrenador en jefe. Este lunes indicó que espera volver en el 2018. También señaló que su agente no ha tenido discusiones con el propietario de los Texans, Bob McNair, sobre una extensión de contrato y "no tiene idea" si pasará al término de la temporada.  "Firmó un contrato por cinco años. Espero volver aquí, pero esas decisiones no las tomo yo", declaró O'Brien. "Mi trabajo es asegurarme que dirijo a estos jugadores. En realidad me preocupo por estos jugadores. En verdad me preocupo por lo duro que están trabajando y el esfuerzo que realizan. Y no estamos viendo los resultados en el campo, así que en verdad quiero intentar mejorar eso en las próximas tres semanas". Los Texans han perdido seis de sus últimos siete partidos y han tenido problemas para anotar a la ofensiva desde que el mariscal de campo novato Deshaun Watson quedó fuera por el resto de la temporada tras romperse el ligamento cruzado anterior. Con Tom Savage en el protocolo de conmociones es posible que los Texans tendrán que iniciar con su tercer pasador diferente esta campaña, T.J. Yates, en la Semana 15. "Disfruto ser el entrenador en jefe de los Texans. Tengo gran relación con los jugadores aquí y voy a seguir dirigiendo hasta que me digan que ya no soy su entrenador", sentenció O'Brien. El entrenador de 48 años de edad tiene marca 31-30 en temporada regular como coach de los Texans y 1-2 en playoffs. Los Texans ganaron títulos consecutivos de la AFC Sur en el 2015 y 2016 antes de desplomarse esta campaña.
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