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El reto de 'Big Ben', vencer a Tom Brady y abrirse camino a otro Super Bowl

PITTSBURGH -- Hasta las leyendas de la Cortina de Acero sienten la urgencia de ganar en lo que es la etapa final de la carrera de Ben Roethlieberger.

Los Steelers, con su quarterback y ofensiva de élite, disputarán un juego ante los New England Patriots que prácticamente decidirá la ventaja de jugar como local en los Playoffs de la AFC.

El ex liniero defensivo de Pittsburgh y miembro del Salón de la Fama, Joe Greene, sabe que estas oportunidades con “Big Ben” deben saborearse.

“Tenemos un quarterback fantástico que, en mi opinión, puede hacer cosas que nadie más puede. Lo que digan, puede lanzar pases como cualquiera o hasta mejor”, dijo Greene a ESPN. “Pero, nadie se mantiene firme en la bolsa de protección y absorber los golpes como él (Ben) lo hace y aún así hacer jugadas. Y tiene la motivación para jugar, pero debe tener fe en su equipo, que sus compañeros se sientan como él”.

El repunte de Roethlisberger en la recta final de la actual temporada no le da tiempo para ponerse sentimental o hablar del retiro. Tras un lento inicio en 2017, “Big Ben” parece estar bien preparado para ganar un tercer anillo de Super Bowl a la mitad de sus 30 años y todo puede iniciar este domingo ante New England en el Heinz Field.

Hace una semana, Roethlisberger derrotó a los Baltimore Ravens con 506 yardas por aire. Ahora, vencer a Tom Brady una vez, quizá dos, para darle brillo a la pelea por ganar el Super Bowl llevaría el ya comentado legado de Roethlisberger a una nueva estratósfera.

El club de los quarterbacks con tres o más anillos de Super Bowl es íntimo: Brady, Joe Montana, Terry Bradshaw y Troy Aikman lo forman.

Roethlisberger no se alimenta de grandes historias. El pasador de los Steelers se preocupa por el siguiente partido en el calendario y lo que éste significa para que su equipo quede bien posicionado en enero.

“Hay mucho en juego, obviamente”, dijo Roethlisberger sobre el juego ante los Patriots. “Es un gran juego, pero es uno de temporada regular, aunque con muchas implicaciones para el futuro”.

Para obtener ese tercer título de Super Bowl, Roethlisberger debe superar al jugador que ha dominado a la defensiva de su equipo. Brady ha hecho trizas a la defensiva de los Steelers con 22 touchdowns y seis victorias en sus últimos siete enfrentamientos.

Sin embargo, el último mes, es Roethlisberger quien ha destrozado a la liga al lanzar para 1,446 yardas, 12 touchdowns y sufrir sólo tres intercepciones en los últimos cuatro juegos, para eclipsar la producción de Brady de 1,058 yardas, ocho touchdowns y cuatro intercepciones en ese lapso.

La ofensiva sin reunión ha hecho que Roethlisberger se suelte con envíos que antes había fallado y que este año parecen rayos laser.

Los jugadores que suelen hacer las jugadas espectaculares en los Steelers ven que el brazo de Roethlisberger está en fuego y se alimentan de él.

“Ben está en fueo. Y todos comemos”, dijo el receptor JuJu Smith-Schuster.

El coach Mike Tomlin espera esto exactamente de su quarterback, al señalar que los Seelers nunca cayeron en pánico cuando los números no eran impresionantes. En una temporada de 16 juegos, “se revela lo que realmente eres”, explica Tomlin.

El sentimiento ayuda a explicar por qué Roethlisberger ocupa el octavo lugar en yardas por aire, el noveno en touchdowns y por qué nunca ha tenido una campaña perdedora, mientras que es, junto con Brady y Peyton Manning, el único quarterback titular con 10 o más años de experiencia desde 2004.

Manning tenía 39 años cuando se retiró y Brady quizá espera a hacerlo hasta los 45. Roethlisberger es un caso distinto. Realmente pareció listo para decir adiós al final de la temporada pasada, luego de que los Steelers cayeron 36-17 ante los Patriots en el Juego de Campeonato de la AFC, y bromeó con el retiro en su programa semanal de radio hasta eventualmente comprometerse a jugar su temporada 14.

Internamente, los Steelers nunca esperaron que su quarterback se retirara, pero ven a Roethlisberger como una renta anual, porque no se ha comprometido a jugar por más de dos años, al menos públicamente, al decidir aprovechar al máximo cada temporada antes de pensar en el futuro.

Roethlisberger ha pensado en igualar los cuatro títulos de Super Bowl de Bradshaw para convertirse en el líder histórico de los Steelers, pero, ganar ahora, con Brady aún en su mejor momento, quizá le dé a “Big Ben” un final ilustre a su carrera con calibre del Salón de la Fama.

“Disfrútalo mientras puedas”, dio el ex coach de los San Francisco 49ers y actual analista de la NFL Network, Steve Mariucci. “Hace tiempo lo pensé, ‘(Ben) probablemente va a terminar el año porque es un luchador y este será el último’.

“Lo ha hecho todo. Ha ganado Super Bowls, ha estado en la cima. ¿Es satisfactorio todo eso para que (Ben) diga que es suficiente? Es cuestión de qué tanto disfruta el momento y de si disfruta el desgaste”, agregó Mariucci.

Roethlisberger debería tener muchas razones para estar encantado con su desempeño actual, aunque descartó hablar de sí mismo al respecto al afirmar que es un esfuerzo conjunto de su ofensiva.

Sin embargo, Roethlisberger ha orquestado tres remontadas consecutivas en el último cuarto para llegar a 43 en su carrera. Los tres juegos se ganaron con un gol de campo de Chris Boswell, lo que, para “Big Ben” no es lo ideal”.

Los goles de campo quizá no sean suficiente ante Brady, a quien Roethlisberger califica “quizá el que mejor ha jugado como quarterback”.

Roethlisberger se sacudió el lento inicio de temporada que vio su rating caer a los 80 puntos, su peor registro en una década. Coaches y jugadores se mantuvieron a su lado, a sabiendas de que la producción llegaría.

Ahora, “Big Ben” está de regreso y le ha dado a los Steelers la oportunidad de ganar en cualquier situación.

“Valoro el momento. Uno desea tener el balón y ser quien tenga la oportunidad de ganar un partido”, señala Roethlisberger. “Lo ganas y te sientes muy bien sobre tu trabajo”.

Especialmente ante New England.