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La disputa fue intensa, pero finalmente Sean McVay obtuvo el nombramiento como Entrenador en Jefe del Año para colocar a Los Angeles Rams como los grandes ganadores de los NFL Honors en la semana del Super Bowl LII. Aaron Donald y Todd Gurley marcaron el camino al quedarse con los premios de Defensivo y Ofensivo del Año, respectivamente, y McVay cerró la velada con su galardón por encima de contendientes como Sean Payton de los New Orleans Saints y Doug Pederson de los Philadelphia Eagles, quien tiene a su franquicia en la búsqueda del Vince Lombardi. Es la primera ocasión que un mismo equipo se queda con esas tres distinciones desde que las mismas se entregan a partir de 1972, de acuerdo con ESPN Stats&Info. Los Rams, que no tenían una temporada con marca positiva desde 2003 y no llegaban a la postemporada desde 2004 cuando aún estaban en St.Louis, Missouri, se quedaron con la División Oeste de la Conferencia Nacional, pero su incursión en los playoffs fue cortada de manera abrupta por los Atlanta Falcons en la Ronda de Comodines. McVay fue capaz de dar vuelta a un equipo que culminó en la última posición de puntos anotados en 2016 para ser ahora la más prolífica con 478 bajo el mismo mariscal de campo que la temporada anterior: Jared Goff. También aparecieron en el Top-10 de yardas totales con 5,784. Del lado defensivo el cambio también fue radical gracias a la incorporación del laureado Wade Phillips. En el departamento de puntos también mejoraron del N°23 al N°12. Cabe recordar que Sean McVay apenas tiene 32 años. En la categoría de asistente del año, el galardonado fue Pat Shurmur por su trabajo con los Minnesota Vikings, lo que también le valió para ser considerado para tomar las riendas de los New York Giants a partir de la temporada 2018.
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