El receptor abierto de los Atlanta Falcons, Julio Jones, informó al equipo que no asistirá al minicampamento obligatorio, dijo el gerente general Thomas Dimitroff en un comunicado emitido este lunes.
"Hemos estado en contacto con Julio y sus representantes'', explicó Dimitroff. "No vamos a discutir esas conversaciones públicamente excepto para decir que sentimos han sido productivas y constructivas. Comprendemos las preocupaciones y pensamientos desde su perspectiva. Aunque no es ideal, Julio nos informó hoy que no asistirá al minicampamento.
"Tenemos mucho respeto hacia él y lo que significa para nuestro equipo, nuestra ciudad y nuestros fanáticos".
Jones tiene tres años y casi 35 millones de dólares restantes en su contrato. Está consciente de que hay otros siete receptores promediando más que sus 14.25 millones de dólares anuales, liderados por Antonio Brown de los Pittsburgh Steelers con 17 millones al año. Cuando Jones firmó la extensión de contrato por cinco temporadas y 71.25 millones de dólares en agosto del 2015, recibió 47 millones de dólares garantizados. Esa es la misma cantidad de dinero garantizado que recibió Jarvis Landry luego de ser canjeado de los Miami Dolphins a Cleveland Browns.
Los Falcons comprenden las preocupaciones de contrato de Jones y parecen estar dispuestos a trabajar con él en algún punto. Jones no se apareció para ninguna porción de las sesiones voluntarias, incluyendo las actividades organizadas del equipo. Ahora enfrentará multas máximas de 14,070, 28,140, y 42,215 dólares por perderse el minicampamento obligatorio de martes a jueves.
El entrenador en jefe de los Falcons, Dan Quinn, inicialmente dijo que esperaba a Jones en el campamento, pero no afirmó que ese mensaje le llegara directamente del propio receptor.
El quarterback Matt Ryan dijo no tener "ninguna preocupación'' respecto a Jones perdiéndose la parte voluntaria del programa de temporada baja pese a mucha discusión en torno al receptor estando suficientemente sano para trabajar en su sincronía con él.
Jones, entrando a su octava campaña de NFL, busca su quinta temporada consecutiva de al menos 1,400 yardas por recepciones.