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Carlos Nava ESPN Digital 6y

Aún hay cosas que mejorar para Cowboys, pero el reto fue superado

ARLINGTON, Texas -- Distó de ser el mejor partido de Dak Prescott o Ezekiel Elliott en números.

Pero es un hecho que fue uno de los mejores de sus jóvenes carreras en motivación y autoconfianza, en particular para el quarterback de los Dallas Cowboys.

Prescott mostró que cuando acepta retos intenta al máximo cumplir en todos aspectos. Así quedó demostrado de nuevo en la victoria 20-13 sobre los New York Giants, el domingo por la noche en el AT&T Stadium de los Cowboys.

El quarterback salió agresivo desde la primera jugada del partido y para la tercera ya había lanzado un pase de touchdown de 64 yardas a Tavon Austin.

Y para el final de la segunda serie ofensiva del cuarto inaugural, los Cowboys ya habían hecho más daño al ataque que en todo el primer juego de la temporada, la semana anterior en Carolina.

“Es importante para nosotros tener un buen arranque de partido en todas las fases del juego para nuestro equipo“, dijo el entrenador en jefe de los Cowboys, Jason Garrett. “Pienso que manejamos bien la pelota en el partido. Dak estuvo particularmente bien desde temprano. Mezclamos la carrera y el pase bien, movimos el balón y capitalizamos esas primeras series“.

“Obviamente, el gran pase a Tavon en la tercera jugada del partido fue muy importante para nosotros“, agregó. “Tuvimos protección en la jugada, que permitió que Tavo corriera una buena ruta larga y después mostrara su velocidad pura con el balón“.

Prescott tuvo unos números discretos. Apenas 160 yardas por pase, al completar 16 de 25 envíos. Pero ni tuvo intercepciones, ni fue capturado.

Hizo jugadas cuando fueron necesarias; por aire y por tierra. Corrió para 45 yardas en siete acarreos, que sorprendieron a la defensiva de los Giants, en un esquema ofensivo la mayor parte del tiempo mucho más agresivo y creativo que en la semana inaugural.

Tal vez fue la presión que el propio Garrett y el coordinador ofensivo Scott Linehan sufrieron, después de una semana en la que fueron criticados en cualquiera de sus variable.

Igual en el caso de Prescott, quien incluso fue retado por el defensivo de los Giants, Landon Collins.

El safety neoyorquino vaticinó que si el partido pasaba por las manos de Prescott, sería menos complicado derrotar a los Cowboys.

“Definitivamente, lo escuchamos“, reconoció Prescott. “Fue como decir ‘reto aceptado’. Pero debo decir que no fui el único que lo aceptó. Lo aceptó este equipo. La ofensiva lo aceptó. Queríamos salir y enseñarles a estos muchachos de qué se trata“.

Elliott corrió 78 yardas y recibió para nueve yardas. Pero también hizo las jugadas cuando se requirieron, como su par de touchdowns, que resultaron de más esfuerzo personal que hueco creado por la línea ofensiva, que sigue sin permitirle 100 yardas después de dos jornadas esta temporada.

“Sólo se trató de ejecución“, dijo Elliott. “Hicimos mejor trabajo esta semana. No nos pusimos solos atrás de las cadenas, estuvimos frente a ellas. Tuvimos algo de momentum y mostramos algo de lo que somos capaces“.

Del resto se encargó la defensiva, que parece mostrar que es real el avance que se vio desde la pretemporada.

La defensa de Dallas capturó seis veces, con seis jugadores diferentes a Eli Manning; apenas aceptó 28 yardas por carrera del corredor Saquon Barkley, segunda selección global de la NFL en el pasado draft, quien hizo más daño por pase, con 80 yardas.

“Nosotros creemos que cada uno de los muchachos defensivos va a tener impacto real en el partido“, dijo Garrett. “La cobertura también tuvo mucho que ver con poder estar cerca del quarterback de manera consistente. Cubrimos hombre a hombre a jugadores muy dinámicos. Fue un juego redondo para la defensa“.

Cierto que la defensa de Dallas sigue cometiendo algunos errores sistemáticos; el más notable es la falta de tackleo, que brinda oportunidades extras a sus rivales.

Pero está creando oportunidades para que incluso su ofensiva tenga campo menos largo para avanzar.

Quizá el balón suelto de Manning en el tercer cuarto, provocado por Demian Wilson y recuperado por Taco Charlton fue la jugada del partido para que los Cowboys empezaran a cerrar su primer triunfo de la temporada.

“Creo que la línea defensiva jugó increíble“, dijo el capitán defensivo, Sean Lee, quien sufrió molestias musculares y calambres en la pierna izquierda. “Pusieron presión, jugaron bien como grupo en todos los aspectos. Detuvieron a un buen corredor. Toda la ofensiva de ellos tiene talento. La secundaria hizo jugadas importantes. Creo que dimos un paso al frente“.

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