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Las interrogantes de la AFC Este bajo la lupa de la Nación NFL

ESPN Illustration

Podría parecer que el verano está en pleno apogeo, pero estamos a pocas semanas del inicio de los campamentos de entrenamiento de la NFL y dos meses y medio de la temporada del 2019. La Nación NFL está preparando cuáles son las mayores tramas a seguir en cada división. Esto es lo que hay que ver en la AFC Este.

¿Podrán los dirigentes de los Buffalo Bills sobrevivir a una campaña sin playoffs en el 2019?

Sí. El head coach Sean McDermott y el gerente general se ganaron la buena fe de los fanáticos en el 2017 cuando condujeron a la franquicia a su primera aparición de playoffs desde 1999. Eso impidió que los fans presionaran cuando los Bills finalizaron con marca de 6-10 la temporada pasada, que fue parcialmente resultado de haber negociado al quarterback Tyrod Taylor y reclutado a Josh Allen, además de ver a su pasador novato en desarrollo lesionarse a media campaña. Los aficionados comprendieron que Beane y McDermott no veían a Taylor como la base de un contendiente a largo plazo, y tienen mayores esperanzas de que Allen pueda convertirse en un quarterback franquicia. Mientras Allen dé un paso al frente en el 2019, Beane y McDermott podrán sobrevivir el 2020 sin meterse a los playoffs. Los dirigentes parecen haber vendido a la afición la idea de mejoría gradual en lugar de la gratificación instantánea. -- Mike Rodak

¿Podrá Josh Rosen evitar que los Miami Dolphins recluten a un quarterback en la primera ronda del draft del 2020?

Rosen debe ganar el puesto, primero, y luego podemos discutir si puede ser parte del futuro a largo plazo de los Dolphins. La primavera fue el show de Ryan Fitzpatrick, con el veterano jugando mejor que Rosen durante las actividades organizadas del equipo y minicampamento. Pero la competencia debe calentarse durante el campamento de entrenamiento. Rosen ha dicho que lo trata como prueba de un año para demostrar a los Dolphins que puede ser su quarterback franquicia. Luego de siete años de Ryan Tannehill, los Dolphins no pueden darse el lujo de conformarse en la posición. Rosen puede probar que vale ser evaluado más allá del 2019 si puede mostrar ejemplos consistentes de liderazgo cuando tenga la oportunidad de iniciar. En un equipo en reconstrucción, la prueba visual --en prácticas y partidos-- tendrán que ser el verdadero barómetro para Rosen. Si hay dudas acerca de él, los Dolphins tendrán que prepararse para seleccionar a un quarterback alto en el 2020. -- Cameron Wolfe

¿Cómo se adaptarán Tom Brady y los Patriots después del retiro de Rob Gronkowski?

Esta pregunta podría no tener respuesta definitiva hasta iniciado el campamento de entrenamiento. La ofensiva de los Patriots bajo el coordinador Josh McDaniels y Brady siempre se ha conformado de acuerdo al personal disponible, así que, si no se hacen más adiciones a la posición de ala cerrada, podría suceder que la posición perdiera énfasis. El veterano de cuarto año, Matt LaCosse, estaba corriendo con el primer equipo en las prácticas de primavera, ¿pero es una opción realista para mantener un estándar a la altura de Gronk? No, ¿pero quién sí lo es? El veterano Benjamin Watson podría ser parte de la rotación, pero se perderá los primeros cuatro partidos de la campaña mientras cumple con una suspensión de la NFL. Stephen Anderson y el recluta de séptima ronda del 2018, Ryan Izzo, siguen en el orden de plantilla. No obstante, siempre existe la posibilidad de que los Patriots concreten un canje o un jugador inesperado quede disponible en el mercado. -- Mike Reiss

¿Podrá el quarterback Sam Darnold mostrar mejoría significativa en su segundo año, siguiendo las recientes tendencias de Jared Goff, Mitchell Trubisky y Carson Wentz?

La situación de Darnold es similar a la de Goff y Trubisky en el sentido de que pasa de un head coach de mentalidad defensiva (Todd Bowles) a uno con antecedentes ofensivos (Adam Gase). No hay nada para el desarrollo de un joven quarterback es contar con un coach que ve el juego a través de los ojos de un quarterback, como demostraron Goff y Trubisky con Sean McVay y Matt Nagy, respectivamente. Es poco realista esperar un salto del calibre de Goff para Darnold porque su elenco de apoyo (véase: línea ofensiva) no es tan fuerte como el de Los Angeles Rams, ni como el elenco de Wentz con los Philadelphia Eagles, para el caso. Pero Darnold tiene suficiente talento, y suficientes personas talentosas a su alrededor como para replicar lo que Trubisky hizo en su segunda campaña: 24 pases de touchdown y 12 intercepciones. Darnold debe ser capaz de elevar su porcentaje de pases completos (57.7) por algunos puntos; las adiciones de Le'Veon Bell y Jamison Crowder ayudarán al respecto. La clave será recortar el número de intercepciones (15 en 13 encuentros), y puede hacer eso si no lanza a coberturas cerradas con la frecuencia que lo hizo el año pasado. -- Rich Cimini