<
>

La Nación NFL responde las interrogantes de la AFC Oeste

AFC Oeste ESPN Illustration

Podría parecer que el verano está en pleno apogeo, pero estamos a pocas semanas del inicio de los campamentos de entrenamiento de la NFL y dos meses y medio de la temporada del 2019. La Nación NFL está preparando cuáles son las mayores tramas a seguir en cada división. Esto es lo que hay que ver en la AFC Oeste.

¿Serán suficientes los movimientos de temporada baja de los Denver Broncos para acabar con la sequía de tres años?

Sí, si sus tres movimientos más importantes funcionan del modo en que esperan los Broncos. Primero, Vic Fangio, quien esperó más de tres décadas como asistente de NFL para recibir su primera oportunidad como head coach, debe estar a la altura del reto. El estilo franco y directo de Fangio se ha ganado a los jugadores desde el inicio. Incluyó un día de unió a la vieja usanza, al estilo carnaval, en el último día de trabajo de temporada baja. Pero ahora, se trata de la administración de juego y el día a día de una temporada regular. Segundo, el quarterback Joe Flacco, de 34 años de edad, debe tener suficiente en la reserva del tanque como esperan los Broncos. Denver necesita que el ex Jugador Más Valioso del Super Bowl haga llegar el balón campo abajo para hilar jugadas grandes. Tercero, el coach de línea ofensiva Mike Munchak, quien también entrevistó para el puesto que consiguió Fangio, debe brindar constancia a una unidad que simplemente sufrió para encontrar continuidad desde antes del retiro de Peyton Manning. -- Jeff Legwold

¿Los cambios a la defensiva llevarán de regreso a los Kansas City Chiefs a un Super Bowl 50 años después de su última aparición?

Lo importante que se debe recordar de la defensiva de los Chiefs en el 2019 es que no tendrán que ser perfectos para llevar a Kansas City a un campeonato. Los Chiefs meramente deben ser mejores que el año pasado. No es una expectativa irracional, luego de contratar al coordinador veterano Steve Spagnuolo para encargarse del grupo de asistentes defensivo, cambiar su sistema base a 4-3, y adquirir a hasta siete nuevos titulares, incluyendo al ala Frank Clark y al safety Tyrann Mathieu. Aunque los Chiefs no serán dominantes defensivamente, se verá una mejoría. Es difícil imaginar a los Chiefs en el 2019 perdiendo cinco partidos en que anotan 40, 51, 28, 31 y 31 puntos, como sucedió el año pasado, incluyendo el Juego de Campeonato de la AFC. Esa derrota de tiempo suplementario ante los New England Patriots les impidió regresar al súper domingo por primera vez desde el Super Bowl IV. -- Adam Teicher

¿Podrá Melvin Gordon llevar a Los Angeles Chargers a un campeonato?

Es el plan. Aunque los Chargers se fueron con marca de 4-0 en partidos que se perdió Gordon la temporada pasada, la ofensiva de los Bolts es más peligrosa cuando el producto de Wisconsin es el motor que la hace caminar. Gordon estuvo diezmado en los pasados playoffs gracias a lesiones de rodilla. El head coach de los Chargers, Anthony Lynn, gusta de recargarse en un juego terrestre y dijo que limitará los toques de Gordon en la pretemporada y durante la campaña regular con la esperanza de que se mantenga más fresco hacia el final de la campaña. Gordon, quien promedió un récord personal de 5.1 yardas por acarreo la temporada pasada, dijo que trabajó en el receso de campaña para convertirse en un corredor más rápido y explosivo. Como Natrone Means durante el único viaje de Super Bowl del equipo en 1994, los Bolts apuestan al estilo violento de Gordon para llevarlos de vuelta al partido más importante, 25 años más tarde. "Quiero ser un corredor compelto", dijo Gordon. "Lo digo todos los años. Incluso las cosas en las que soy bueno, quiero ser grandioso. Las cosas en las que soy promedio, quiero ser grandioso. Simplemente, es quien soy. Quiero seguir trabajando, seguir esforzándome y ser el mejor corredor allá afuera". -- Eric D. Williams

Antonio Brown y Derek Carr se han vuelto inseparables en el receso de temporada, pero ¿qué le sucederá a la relación si los Oakland Raiders inician la campaña lentos, y Brown no recibe tantos pases como quisiera?

Brown, cuya fea salida de los Pittsburgh Steelers fue bien documentada, ha hecho y dicho todas las cosas correctas a su llegada a Oakland, desde su legendaria ética de trabajo a su habilidad supernatural para desmarcarse y atrapar el ovoide. Pero los Raiders tienen el calendario más difícil en la NFL, exacerbado por un inicio brutal que los verá jugar sus dos primeros partidos en casa y luego no volver a Oakland hasta el 3 de noviembre. Con tantas piezas nuevas, especialmente a la defensiva, un inicio de 1-6 --cuatro de los primeros siete oponentes de los Raiders estuvieron en la pasada postemporada-- no sería sorpresa. Y Brown está acostumbrado a recibir el balón, como queda evidenciado por su promedio de 11.3 balones lanzados en su dirección desde el 2014. Jordy Nelson, el objetivo primario de Carr la temporada pasada entre receptores abiertos, promedió apenas 5.9 por partido. Brown llegó a Oakland para ganar y ser productivo, no que esas cosas sean excluyentes. Pero si los Raiders van a verse superados de inicio y Brown recibe la atención que recibía Nelson, la luna de miel será breve. -- Paul Gutierrez