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EAST RUTHERFORD -- Es improbable que el corredor de los New York Giants, Saquon Barkley, juegue el jueves por la noche frente a los New England Patriots pese a regresar a las prácticas la semana pasada, dijeron múltiples fuentes a ESPN. Había tenido la mira puesta en el partido de esta semana como potencial fecha de regreso. Además, existe una posibilidad real de que los Giants estén sin el ala cerrada Evan Engram, quien lidia con un esguince de ligamento medial cruzado y podría no estar suficientemente sano para medirse ante New England, dijo una fuente a Adam Schefter de ESPN. Engram lleva paso para una temporada récord con 33 recepciones para 373 yardas y dos touchdowns. Barkley ha estado lidiando con un esguince en la parte alta del tobillo sufrida el 22 de septiembre en contra de los Tampa Bay Buccaneers. Tiene programado volver a entrenar el martes, pero no se espera que reciba alta médica a tiempo para lidiar con los rigores de un partido. El head coach Pat Shurmur dijo el lunes que los Giants harán lo que sea mejor para el equipo, y Barkely regresaría cuando pudiera jugar a un alto nivel, y protegerse. Es prácticamente una certeza que no sucederá el jueves. Sentar a Barkley contra unos invictos Patriots le brinda unos 10 días adicionales para recuperarse a tiempo para un duelo de la Semana 7 frente a los Arizona Cardinals. No tener disponible a Barkley el jueves deja a los Giants (2-3) cortos en contra de la mejor defensiva de la liga. El corredor Wayne Gallman y el receptor abierto Sterling Shepard también se perderán el partido de jueves por la noche. Ambos sufrieron conmociones. New England está permitiendo 6.8 puntos por partido en la campaña. El novato no reclutado Jon Hilliman y el fullback Elijhaa Penny, un corredor convertido, esperan llevar la carga sin Barkley ni Gallman. Austin Walter también podría ser elevado desde la escuadra de prácticas. Una alternativa desde afuera parece complicada con tan poco tiempo. El plazo original reportado para Barkley era de cuatro a ocho semanas. Han pasado 16 días desde la lesión. Parecía que Barkley superaría el pronóstico cuando regresó al campo de prácticas la semana pasada, y comezó a correr y realizar cortes casi a velocidad total en un campo lateral con un preparador físico. Mejoró conforme progresó la semana e incluso pudo trabajar con la escuadra de prácticas el viernes. Barkley fue listado como partícipe limitado en el reporte de lesionados proyectado del lunes, con los Giants en la semana corta. "Lo está haciendo grandioso", dijo Shurmur el lunes, antes de agregar que Barkley estaba más cerca de volver que la semana previa. Shurmur dijo que existía la posibilidad de que Barkley regresara en contra de los Patriots. Parece altamente improbable. Barkley tendría que recibir alta de los médicos, y el riesgo a largo plazo es mayor que la recompensa a corto plazo, en este caso. Los Giants llegan al partido del jueves desfavorecidos en las apuestas por 16.5 puntos. Barkley fue el segundo recluta global del año pasado, y ganó honores como Novato Ofensivo del Año de la NFL con más de 2,000 yardas totales desde la línea de golpeo. Inició este año de modo similar, con un par de partidos de 100 yardas. Pero Barkley quedó lastimado atrapando un pase del quarterback Daniel Jones en el segundo periodo de la victoria de la Semana 3 sobre los Bucs. Su tobillo quedó atrapado y se dobló hacia atrás mientras era derribado de lado, al tiempo que su momento lo llevaba hacia la línea lateral. Barkley pasó la segunda mitad de aquel partido portando una bota y parado en muletas. Una resonancia magnética y una segunda opinión revelaron que se trataba de un esguince en la parte alta del tobillo, lo que parecía indicar una ausencia prolongada. Barkley dijo a ESPN que similar a una lesión sufrida durante primer año en Penn State. Se perdió dos partidos y regresó 21 días más tarde para lo que fue, en su momento, su mejor actuación terrestre (194 yardas), en contra de Ohio State.
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