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Lo mejor de la UEFA Champions League se jugará en simultáneo

BUENOS AIRES -- El sorteo de octavos de final de la UEFA Champions League nos dejó con una sensación agridulce: habrá dos grandes partidos, con equipos que pueden ser finalistas tranquilamente, pero ambos se jugarán el mismo día.

Así lo quiso el sorteo: Arsenal-Barcelona y Juventus-Bayern Munich nos obligarán a mirar otra TV de reojo o a grabar uno de los dos encuentros. Es una lástima que los dos mejores partidos de toda la eliminatoria coincidan en día y horario. Porque estarán jugando, en simultáneo, los dos grandes candidatos que a mi entender tiene esta edición del torneo, pero con el condimento extra de que enfrente tendrán a rivales de muchísima estatura.

Serán dos partidos igual de atractivos pero a la vez muy distintos en su desarrollo, porque en uno habrá batalla por la posesión para luego construir a partir del buen trato de pelota, mientras que en el otro, uno de los dos será el dueño de la pelota y el otro esperará para lastimarlo cuando encuentre espacios.

En Arsenal-Barcelona tendremos frente a frente dos estilos muy parecidos, con planteles muy ricos desde lo técnico y convencidos de que adueñarse del balón y cuidarlo es clave para generar chances. En ese campo, Arsenal tiene muy poco que envidiarle al campeón reinante, ya que con jugadores como Ozil y Cazorla tiene creación asegurada, mientras que Giroud se encuentra en un gran momento goleador. Viene en el lote de punta de la Premier League y consiguió una clasificación a puro corazón en la Champions: si mantiene este nivel llegará a febrero en posición de dar la sorpresa.

Está claro que Barcelona es favorito. Venimos diciendo que parece estar un escalón por encima del resto junto a Bayern, pero hay que ver cómo se encuentra dentro de dos meses. Si bien mantiene su ritmo goleador, algunos partidos le están costando más de lo que uno esperaría. Tiene que superar, todavía, el Mundial de Clubes y la carga extra que eso le agrega a su calendario, además del riesgo de lesiones que siempre acecha.

Puede que todo eso le pase factura como puede que no. Todo equipo tiene altibajos en su rendimiento y el Barcelona de la temporada pasada es el mejor ejemplo. Llegó a mediados de enero con su técnico muy cuestionado y fue recién con una serie de resultados, incluyendo los octavos de la Champions, con los que se terminó de consolidar. De ahí en más todo fue para mejor, hasta cerrar con la tripleta.

Mientras tanto, a varios kilómetros de distancia veremos un choque muy diferente, con tácticas enfrentadas, pero que puede ser tan o más emocionante. El Bayern de Guardiola saldrá a adueñarse de la pelota desde el minuto cero, mientras que Juventus esperará pacientemente por sus oportunidades.

También aquí el Bayern parte, a priori, con ventaja. Con un plantel de lujo en el que acumula jugadores de primer nivel internacional, tiene recambio de sobra para afrontar todas las competencias en simultáneo. Pero cuidado que en la Bundesliga perdió su invicto y permitió que se le acerque un Borussia Dortmund con menos obligaciones.

Por otro lado, hay momentos en que su ataque se vuelve tan frontal que atrás queda descompensado. Esto es algo característico del fútbol alemán, pero que con el Bayern se multiplica al alinear tantos volantes ofensivos. Una pelota perdida en ataque lo puede dejar en enorme inferioridad numérica, y cuando del otro lado hay atacantes veloces la puede pasar muy mal.

Y eso es exactamente lo que tiene Juventus: delanteros fulminantes en la contra. Dybala está en un gran momento, Morata sigue siendo el mismo que brillara el año pasado jugando por delante de Tevez y a ellos se les suma un Mandzukic con potencia goleadora. En definitiva, cada uno moverá sus fichas convencido pero, a la vez, con mucha precaución.

Hay un tercer duelo para sumar al podio, ya que el ganador podría sumarse a la lista de candidatos por el empujón anímico que le significaría superar esta eliminatoria: el que protagonizarán París Saint Germain y Chelsea. Ambos han jugado dos series muy parejas en las últimas dos temporadas: las dos terminaron decidiéndose por el gol de visitante, una para cada lado.

En este momento, PSG parece llegar en mucha mejor situación, ya que está más firme en el frente local y tiene un funcionamiento mucho más aceitado. Pero eso no significa prácticamente nada en este nivel, y menos entre dos equipos con tanto talento.

Además, Chelsea de a poco encarriló su situación en una Champions que por momentos lo tuvo eliminado y terminó dejando afuera al Porto de modo muy convincente. Mourinho necesita consolidar su posición al mando y nada mejor que sacar a relucir su mística copera en una instancia así.

Será otro choque de estilos, con PSG jugando un fútbol más elegante, pero a Mourinho nadie le puede discutir su elección táctica: puede gustar más o menos, pero que ha tenido éxito es algo innegable.

Lo mismo sucede con el Atlético Madrid de Simeone, que con un fútbol muy realista sigue confirmando esta temporada todo lo bueno que mostró en las anteriores. Trepó al frente de La Liga, clasificó primero en su grupo y sigue dando muestras de solidez.

Cada vez que se tuvo que reforzar, el Atlético lo hizo sin estruendo pero con mucho éxiton. Cambió a su arquero y a su goleador y consiguió reemplazar a jugadores que parecían insustituíbles. Y sigue fiel a un libreto y a una cultura de trabajo que le ha dado muchas alegrías y que lo coloca como favorito ante el PSV Eindhoven.

También es favorito Real Madrid ante Roma, principalmente por su poderío ofensivo. Además, los de la capital italiana no pueden salir de la irregularidad.

La diferencia de jerarquía debería inclinar la balanza a favor de los de Rafa Benítez, a menos que arranque la serie con el pie izquierdo. Si la Roma anota rápido y se agrupa bien atrás, dejará al Madrid en el escenario menos deseado y en el que más se complican sus delanteros.

Es que la gran diferencia que marcan Cristiano Ronaldo, Bale y Benzema la hacen cuando tienen espacios para moverse. Ahí son letales por velocidad y control. La historia es muy distinta cuando tienen que circular por espacios reducidos. Veremos si la Roma consigue llevar las cosas a ese terreno.

Otro que parte con ventaja es Manchester City, que definirá en casa y que cuenta con un plantel mucho más rico que el Dinamo Kiev. Encima, los ucranianos vendrán de su receso de invierno, con lo cual les costará mantener el ritmo.

Y para el final, dejamos dos series que podrian terminar deparando un semifinalista impensado. O que, al menos, dejarán a dos equipos que no necesariamente están, hoy por hoy, entre los ocho mejores de Europa.

Hablamos de Gent-Wolfsburgo y de Benfica-Zenit. El sorteo favoreció a los cuatro, ya que les despejó un poco el camino hasta cuartos de final. Y si los dos que avanzan vuelven a cruzarse cuando se sorteen los cuartos, uno de ellos estará a apenas un paso de la final habiendo evitado a los grandes candidatos.

Pero para eso falta demasiado, más aún de lo que tenemos por delante hasta febrero, cuando comience la Champions que todos estamos esperando.

Felicidades.