BARCELONA -- El desencuentro entre el FC Barcelona y la UEFA volvió a quedar de manifiesto este martes, cuando 30 mil enseñas independentistas ondearon en el Camp Nou y el himno de la Champions fue muy protestado por la afición que acudió al partido frente al Celtic.
Distintas entidades soberanistas repartieron en los aledaños del estadio azulgrana las 30 mil cartulinas gracias a la colaboración de un centenar de voluntarios que de acuerdo a lo comunicado por los organizadores agotaron las existencias cuando faltaba aún más de media hora para el inicio del encuentro.
El FC Barcelona, aludiendo con su silencio a la libertad de expresión, ni prohibió la entrada de dichas cartulinas al estadio ni en ningún momento de los días previos se manifestó en contra de la presencia de las mismas. A pesar de ser consciente de los problemas que puede volver a provocarle.
El asunto se arrastra desde la final de la Champions de 2015 en Berlín que motivó meses después una segunda multa de 40 mil euros al club azulgrana por la presencia de las banderas independentistas en el partido frente al Bayer Leverkusen…
Y aquello motivó que el Barcelona, en diciembre, anunciara que acudiría al TAS contra la sanción y que, además, el rechazo contra la UEFA se generalizara entre los aficionados.
Con el inicio de la nueva temporada la historia se ha repetido. La entrada de los dos equipos al terreno de juego fue saludada con una gran pitada al himno de la Champions que ya sonaba por los altavoces y en la zona de lateral se desplegó una gran pancarta con el lema ‘Welcome to Catalonia’.
A la vista de lo sucedido en el pasado, en el Barcelona se tiene constancia que la UEFA, muy poco amiga de ningún tipo de reto, puede volver a imponer una sanción económica al club. Y la guerra de las banderas, claro, seguirá…