Casi todo, pero no todo, parece decidido. Y por encima de todo se nota el cabalgar furioso de un PSG que le metió siete goles al Celtic, suma 24 en cinco jornadas y alumbra, ahora, como el equipo más poderoso del torneo.
Está junto al Bayern, con el que se jugará la primera plaza de grupo, en la ronda siguiente como lo están el Manchester City, el United, el Chelsea, el Barça, el Tottenham, Real Madrid y Besiktas. Falta una última jornada apasionante con clasificaciones en el aire… Pero con la sensación de que los aspirantes verdaderos, los favoritos de verdad, ya están donde querían estar.
GRUPO A: El gafe de Suiza. El Manchester United, que se dejó una vez su clasificación en Basilea, volvió a perder en el mismo escenario y aunque la trascendencia para nada es la misma porque los Diablos Rojos ya estaban en octavos de final, el peso del resultado se conocerá en la última jornada, cuando gracias al gol de Lang se jueguen los suizos su pase en Portugal ante un Benfica que ya está fuera de Europa.
GRUPO B: Un torpedo llamado PSG. Se atrevió el Celtic, en el primer y afortunado remate a puerta, a adelantarse en el Parque de los Príncipes y recibió una respuesta brutal por parte del PSG, que en 26 minutos le metió 4 goles en una exhibición de fuerza. Y acabó metiéndole siete para demostrar que es el equipo más fuerte, ahora mismo, de Europa. Pero que aún no tiene atado el primer puesto que se jugará cara a cara en Múnich ante un Bayern que ganó en Bruselas y debería meterle cuatro goles para descabalgarle. Lo que, de entrada, se entiende una utopía.
GRUPO C: Adiós Atlético. El equipo del Cholo Simeone casi se despidió de la Champions antes de comenzar su partido ante la Roma, condenado a un milagro utópico por la goleada, solvente, del Chelsea en Uzbequistán, donde el equipo de Antonio Conte cerró su pase a octavos paseándose ante un Qarabag que pasará a la historia, de no mediar un milagro, como el culpable del hundimiento colchonero. Su victoria ante la Roma, con protagonismo especial de Griezmann, no será suficiente. A no ser que haya milagro final.
GRUPO D: ¿Dónde está Messi? Por primera vez en cuatro años y medio Leo Messi jugó un partido de Champions como suplente. Y alrededor del Barcelona significó una sorpresa mayúscula, abriendo la puerta a toda clase de especulaciones. Luego entró y la estrella fue Ter Stegen, al final, para solventar el pase del Barça a octavos de final gracias al empate y dejando a la Juventus pendiente de la última jornada.
GRUPO E: Empate por Berizzo. El Sevilla le igualó de manera épica un 0-3 al Liverpool, que sufrió un milagro en el Pizjuán a manos de un Sevilla que le dedicó el despertar a Eduardo Berizzo que anunció a sus jugadores que padece cáncer. La igualada mantiene curiosamente abierto el grupo hasta la última jornada, con el Liverpool, líder, pero aún pudiendo quedar fuera si cae en Anfield en la última jornada ante el Spartak de Moscú, que cedió un fatal empate en el último suspiro ante el Maribor.
GRUPO F: El City suma y sigue. Al Manchester City no hay quien le frene y aunque tuvo que esperar hasta el minuto 88, sentenció su quinta victoria consecutiva en el torneo, en que ya tiene el pase a octavos como primero de grupo. Destacó Guardiola dando entrada a dos jóvenes canteranos (Foden y Brahim) al tiempo que en San Paolo el Nápoles se agarraba al milagro aplastando en la segunda mitad a un Shakhtar que no podrá perder en la última jornada frente a los Citizens si no quiere ver peligrar su pase.
GRUPO G: Historia en Estambul. Después de 70 minutos a todo ritmo, Besiktas y Porto entendieron que el empate era lo más adecuado. ‘Si no puedes ganar asegúrate de no perder’ dijo un día Johan Cruyff y los dos equipos lo comprendieron. El Besiktas, que comenzó perdiendo y sufriendo, aseguró su pase a octavos como primero; el Porto será segundo si gana en el cierre al eliminado Mónaco, haga lo que haga el Leipzig, que arrasó en el Principado.
GRUPO H: Dominio de los Spurs. El Tottenham se aseguró el pase a octavos como primero remontando en Dortmund y haciendo inútil la goleada del Real Madrid en Chipre, donde recuperaron sensaciones Benzema y Cristiano Ronaldo ante un APOEL que mostró la peor cara. El campeón de Zidane perdió el tren del liderato en Wembley y ya no lo pudo recuperar.