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Marcó Messi un hat-trick, fue expulsado Cristiano Ronaldo, cayó el Manchester City en casa, se echó de menos al VAR en Gelsenkirchen, remontó con milagro el Inter, decepcionó aún perdiendo en el descuento el PSG, ganó con sus armas el Atlético, explotó Pogba… De todo. La presentación de la Champions de las estrellas tuvo de todo. El torneo se estrenó con un magnífico lanzamiento de falta de Messi que dio paso a una jornada que tuvo no pocos hechos destacados. El martes mostró que el Atlético sigue agarrado a su personalidad para ganar, que la fortuna vale su peso en oro (la del Borussia Dortmund), que el Liverpool sigue siendo un equipo tan enrabietado como decepcionante es, de momento, el PSG y que una vez conocido el VAR ya no sabemos vivir sin él. El penalti, inexistente, que disfrutó el Porto es el primero de los ejemplos. El miércoles se presentó el campeón con una victoria menos fácil de lo esperado ante una Roma que mantuvo el 0-0 hasta el último suspiro del primer tiempo, cuando la imagen era el llanto de Cristiano Ronaldo, expulsado en Mestalla, en su primer partido de máxima competición desde que dejó el Madrid. Como si fuera imposible centrarse en un escenario, en Suiza se catapultaba Pogba al tiempo que en Manchester el Lyon le daba un revolcón inesperado al City de Guardiola y en la República Checa el Viktoria daba un golpe sobre la mesa. Muchas cosas, muchísimas, en una presentación de Champions vivida a todo ritmo. GRUPO A Rebote y remontada. Después de encadenar 4 victorias en casa y permanecer 8 partidos invicto desde que comenzó la temporada, un balón rebotado en Perisic cerca del final provocó la derrota de un desafortunado Brujas ante el Borussia Dortmund, que comenzó a mostrar su papel de favorito en el grupo junto al Atlético de Madrid, sorprendido en Mónaco de entrada por el gol de Grandsir pero que remontó a la vieja usanza: un contragolpe solventado por Diego Costa y un remate de cabeza de Giménez a la salida de un corner. GRUPO B La promesa de Messi. Leo se presentó en agosto prometiendo que daría la vida por conquistar un título que se le resiste al Barça desde 2015… Y trasladó sus palabras a los hechos. Abrió la lata en un partido incómodo frente al PSV con un lanzamiento de falta soberbio y cerró el estreno con el octavo hat-trick de su carrera en Champions. Con Messi todo es posible. Mientras, en San Siro, el Tottenham perdió en seis minutos fatales una victoria que acariciaba frente a un afortunado Inter, que volvió al torneo con una sonrisa inesperada. GRUPO C Pasión en Anfield. Merecedor de una victoria más holgada, el Liverpool la confirmó gracias a Firmino en tiempo añadido frente a un PSG decepcionante, muy alejado de la grandeza que se le presupone y que igualó un 2-0 con mucha más suerte que juego. Al tiempo, en Belgrado, el Estrella Roja se estreno en una fase de grupos de Champions con un afortunado empate frente al Napoli, al que solo la madera apartó de una victoria que mereció. GRUPO D Vergüenza en Gelsenkirchen. El Porto, que había fallado un penalti en el minuto 13 por medio de Telles, igualó en el minuto 75 el 1-0 de Embolo por medio de otra pena máxima… Absolutamente inexistente. Moussa Marega se tiró descaradamente tras superar a Naldo y el árbitro, el español Gil Manzano, señaló un penalti que transformó Otavio. ¿Y el VAR? De vacaciones. La igualada entre Schalke y Porto benefició al Galatasaray, que se presentó arrollando en Estambul a un Lokomotiv muy inocente. GRUPO E Un ciclón en Lisboa. El Bayern no perdió el tiempo y de buenas a primeras presentó su candidatura en la capital portuguesa, derrotando al Benfica y marcando Renato un gol, el 0-2, que mereció, por su espectacularidad y por ser quien era el autor, el aplauso generalizado de la hinchada local. El triunfo de los alemanes respondió a la goleada del Ajax sobre el AEK, con doblete de Tagliafico. GRUPO F Sorpresón en Manchester. Candidato mayúsculo, el Manchester City de Pep Guardiola comenzó la temporada europea tal y como acabó la pasada, perdiendo en casa. Su derrota frente al Olympique de Lyon, mortal en las contras, deja al equipo de Guardiola en una impensable e incómoda situación, menos grave de lo que podría haber sido si el Hoffenheim no se hubiera dejado empatar en la recta final por el Shakhtar en Ucrania. GRUPO G Isco, a lo Messi. Al campeón le costó, y no poco, derribar el muro de la Roma y no pudo empezar a respirar hasta el límite del primer tiempo, cuando Isco, emulando al mejor Messi, ejecutó con magnificencia un lanzamiento directo para encaminar su victoria, que sentenció en la segunda parte, al tiempo que el Viktoria Plzen regresó al cabo de cinco temporadas a la fase de grupos de la Champions enfrentándose al CSKA, curiosamente su último rival en diciembre de 2013. Y teniendo en la mano el mismo resultado de entonces, 2-1, un penalti transformado por Vlasic en tiempo añadido provocó la igualada final. GRUPO H La primera expulsión de Cristiano. La Juventus ganó con suficiencia en Valencia, con dos penalties… Que no llevaron la firma de Cristiano Ronaldo. El portugués sufrió la primera expulsión de su carrera en la Champions League después de un extraño encontronazo con Murillo, que fue interpretado por el juez de gol como una agresión y que motivó que el portugués abandonase llorando el terreno de juego. Al triunfo de la Juve respondió en Suiza el Manchester United paseándose ante el Young Boys, con un estelar Pogba al frente.
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