A Antofagasta se le viene un año complicado. Tras su histórica última campaña, consiguió un cupo para la Copa Sudamericana. Para dar pelea en Chile y en el extranjero se ha reforzado con refuerzo de alto tonelaje. El último en sumarse fue el arquero Agustín Rossi.
El argentino estuvo en Boca Juniors la última temporada. Al cuadro Xeneize llegó a principios de 2017 y jugó largo tiempo como titular, pero errores puntuales en partidos bravos lo relegaron a la suplencia. Pese a ello, estuvo bajo los tres palos en la final de ida de la Copa Libertadores frente a River Plate.
“Con la llegada de Marcos Díaz a Boca surgió la opción de venir y no lo dudé. Además está el incentivo de jugar la Copa Sudamericana”, dijo el futbolista de 23 años tras la derrota de los Pumas frente a Unión Española.
Sin embargo, su presencia en el torneo continental no está garantizada. El cuadro nortino incluyó en su lista de buena fe al sancionado Paulo Garcés. La dirigencia ya envió una carta a la CONMEBOL para que el argentino pueda atajar el próximo martes ante Fluminense. Pero el poco tiempo no invita al optimismo.
En Boca, Rossi coincidió con Carlos Lampe. El exarquero de Huachipato le contó cómo se juega y se vive el fútbol en Chile: “Vengo a crecer y madurar. Y en lo colectivo, mi idea es pelear el campeonato”, aseguró el ex Estudiantes de La Plata.