Miguel Ángel Russo, entrenador argentino de Millonarios, mostró mucha mesura tras la dura derrota por 2-1 ante Independiente de Santa Fe, por el clásico capitalino correspondiente al encuentro aplazado por la fecha 2 de La Liga Águila.
"Creo que fuimos parejos. La diferencia es mínima. En el mejor momento nuestro vino el gol . Hay una jugada determinante en el primer tiempo que fue o no penal. En un partido parejo, cambia el resultado. Después vi la jugada. Costó, pero también el rival juega. Estoy conforme con lo de Cadavid, que volvió a ser importante. Queda recuperarnos para el partido que viene. Así es este juego. En algún momento fueron superiores ellos, en otro nosotros", recalcó.
Para Russo, el cambio estratégico de Santa Fe, al mando de Gustavo Costas, fue significativo para inclinar por completo la balanza a su favor.
"El rival modificó, en algún momento fue importante, pero nosotros los superamos también. Tuvieron 10 o 15 minutos después de que hicieron el empate. Luego Millonarios estaba mejor. Para mí la jugada de Mosquera es determinante. Estos partidos son así. Detalles, pequeñas cosas. El árbitro y el línea de ese lugar tendrán las respuestas", enfatizó Russo.
Del mismo modo, el DT del cuadro embajador aseguró que el equipo debe superar los errores que cometió, más allá de cuál sea el compromiso que esté afrontando.
"Son dos equipos parejos, fuertes, cada uno a su manera. Creo que en lo táctico no tuvo nada que ver el rendimiento de los jugadores. Nos costó un poco más por las bandas, pero es normal. Este tipo de partidos son los que tenemos que aprender y asimilar", aseveró.
Por último, dijo que el equipo ha venido respondiendo de la mejor manera ante la exigencias que se han presentando, aunque queda preocupado por la generación de juego de sus dirigidos ante Santa Fe.
"Quedo preocupado porque la producción no fue permanente. Esa esa la única preocupación que tengo. Hay rendimientos que tienen un pico y otro bajo. No tenemos la media. Conseguirla es lo más difícil. Vamos a buscar eso, que se consigue manejando los niveles y las intensidades, sabiendo y entendiendo que no son máquinas. Soy optimista con todo. Este tipo de partidos hay que analizarlos bien. Ni un día somos los mejores ni al otro un desastre", sentenció el técnico argentino.