La Selección Colombia, que volverá a recibir la Copa América en 2020 compartiendo la sede con Argentina, ya sabe lo que es ser campeón e invicto del certamen internacional siendo el país anfitrión. Además, es el único título que registra la Mayor
En la edición 2001, los dirigidos por Francisco Maturana levantaron el trofeo luego de registrar números brillantes -ganaron todos los partidos que jugaron, no recibieron goles y tuvieron al máximo artillero Víctor Aristizábal con seis anotaciones-.
En la fase de grupos, la Tricolor superó por 2-0 a Venezuela, 1-0 a Ecuador y 2-0 a Chile. En cuartos de final eliminó a Perú tras superarlo por 3-0 y en semifinales doblegó a Honduras. En la final y con gol de Iván Córdoba venció a México para la tan deseada coronación.
A diferencia de esta versión, en donde solo Bogotá, Cali, Medellín y Barranquilla serán las plazas designadas, el torneo en 2001 contó con siete estadios como sedes: el Campín de Bogotá, el Atanasio Girardot de Medellín, el Metropolitano de Barranquilla, el Pascual Guerrero de Cali, el Palogrande de Manizales, el Centenario de Armenia y el Hernán Ramírez Villegas de Pereira.
Argentina, que era una de las candidatas al título, se dio de baja del torneo internacional ya que no veía seguro participar del certamen por los problemas que había tenido Colombia con la FARC (las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia). En su lugar fue Honduras, que dio el batacazo al eliminar a Brasil en cuartos de final.
Dos semanas antes a que comenzara el torneo, los guerrilleros secuestraron a Hernán Mejía Campuzano, el vicepresidente de la Federación Colombiana de Fútbol de aquel entonces, y en lo que iba del año atacaron con bombas varias de las principales ciudades.
Mejía fue liberado tres días después, pero a pesar de la buena noticia, la Conmebol decidió suspender la sede y fue el propio vicepresidente junto a Andrés Pastrana, el Presidente de la Nación, quienes le pidieron a los directivos que cambiaran la decisión y los convencieron.