Fútbol Americano
Washington Cucurto 8y

Huracán está con ganas de ganar todo

BUENOS AIRES - Hace tiempo que Peñarol ya no es lo que era. Atrás quedaron esos partidos por Copa en los cuales ganarle al equipo uruguayo era una tarea casi imposible. Con grandes equipos y jugadores extraordinarios, Peñarol daba cátedra de fútbol e imponía un estilo de lucha, buen juego y garra que quedó olvidado con el paso de los años.

Hoy por hoy, Peñarol es un equipo que juega sin pena ni gloria. Ha perdido buena parte de la chispa. Anoche, jugó ante un Huracán de Parque Patricios, distinto, con ganas de ganar todo, con hambre desesperado de triunfo.

Y entre dos equipos con tales características era más que lógico que Huracán le diera un paseo a Peñarol y no lo goleó por falta de puntería. En el estadio Centenario, cuna del mejor fútbol del mundo, el equipo local fue superado en todas sus líneas.

La felicidad es del equipo argentino que consiguió un triunfo histórico, no por la dureza del rival, sino por la prepotencia de la historia. Por otro lado, vale más analizar lo hecho por Huracán que es un equipo más que interesante, con un sistema de juego bastante atípico en el fútbol mundial. Creo que Huracán debe ser el único equipo del mundo que todavía juega con un extraño enganche, Montenegro, un jugador de otro Planeta, un jugador de los que ya no existen a nivel mundial.

Vivo a cinco cuadras de la Plaza de Patricios sobre la Avenida Caseros, así que apenas concluyó el partido, salí para la calle a sentir las voces de la gente. Y la alegría era total. ¡Fue como si hubieran ganado la Copa del Mundo!

Es Huracán es un club que necesita alegrías, triunfos y es por eso que el reconocimiento para este equipo es histórico, porque está logrando cosas que hace mucho no se logran. Y ahí vamos...

Una multitud con banderas y camisetas de Huracán se agolparon frente a la Estación de subte Parque Patricios. Alentaban y gritaban, mientras abajo, quizás, en los túneles, Quique Ferrari estaría limpiando las vías. Quique Ferrari es un gran escritor que limpia las vías del subte cuando todos duermen. Es el mejor escritor argentino...

Y los hinchas alentaban superexcitados el gran triunfo de Huracán cuando de pronto, por el calor mismo de la algarabía quemera. Un subterráneo que dormía el sueño de los héroes, reponiéndose para llevar a miles de personas a la mañana siguiente, comenzó a gruñir, encendió sus luces y como si fuera un gusano... un gusano de lata, subió a la superficie rompiendo las gradas de protección.

Y todo producto de la alegría de la gente de Huracán que le transmitieron una extraña energía a esta máquina de 58 vagones y 2 kilómetros de largo. El subte de Huracán comenzó a zarandearse imitando los movimientos de los hinchas del Globo.

Y ante tamaño espectáculo a los hinchas no les quedó otra que subirse al subterráneo de Parque Patricios que se elevó llevándose a todos los muchachos rumbo a un nuevo objetivo. No sé dónde jugará Huracán su propio partido, pero para allí, va el subte colmado de hinchas, volando, tomando una altura inclasificable. Rumbo a Montevideo, Lima, Caracas, donde el Globo tenga sus próximos desafíos, ahí estarán estos muchachos con su subterráneo volador.

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