Real Madrid eliminó al Atlético de Madrid en las semifinales de la Supercopa de España con un 5-3 que demuestra el espectáculo de unos 90 minutos en los que las defensas brillaron lo mismo por sus defectos que por sus aciertos.El Real Madrid eliminó al Atlético de Madrid en las semifinales de la Supercopa de España con un 5-3 que demuestra el espectáculo de unos 90 minutos en los que las defensas brillaron por sus defectos y aciertos. Lo explicamos a continuación porque, de primeras, suena extraño. Y es que, salvo el gol de Griezmann y el de Brahim, el resto de los tantos fueron marcados por defensas. Suena incoherente por la espectacularidad del resultado, pero las líneas traseras fueron un desastre a la hora de su cometido, que no es otro que, como dice su nombre, defender. Empezando por el principio, Mario Hermoso remató a placer un córner sin ningún tipo de oposición por parte de una defensa del Madrid completamente descolocada y dormida. A continuación empató Rüdiger, que honró al fallecido Beckembauer como sólo él sabe hacer. La trasera del Atleti sólo pudo observar el cabezazo del zaguero alemán. Ferland Mendy remontaba para el Madrid. Por si alguno está perdido, el francés es un lateral que, tras una asistencia de Dani Carvajal -otro defensa-, tocó lo justo para batir a Oblak ante la impotencia de la zaga colchonera. Seguimos con los defensas. El empate a dos goles, como ya hemos comentado, lo marcó Griezmann antes del descanso en un alarde de calidad individual exquisito. El delantero que más trabaja en defensa (¿casualidad?) acabó con la zaga blanca que no supo que hacer ni ante el control orientado del delantero, ni ante su disparo. Con el empate se llegó a un descanso en el que los espectadores se frotaban las manos por la lluvia de goles y los entrenadores se tiraban de los pelos por el desastre táctico en defensa de ambos equipos. Y es que en la reanudación fue peor. El Atleti se puso por delante con un gol en propia meta de Rüdiger que, con un mal Kepa, acabó en el fondo de la red dejando al Atleti por delante en el marcador en el minuto 78. Los de atrás volvían a cantar, pues. Pero como si de una lucha de UFC se tratara, un ataque siempre se responde con otro y Dani Carvajal, sí un defensa, colaba entre los tres palos el balón que forzaba la prórroga tras una lluvia de rechaces dentro del área ante la que los defensores del Atleti no pudieron hacer nada. Otra feria atrás. El último tramo fue del Real Madrid por la superioridad física. El Atleti, arrinconado y sin gasolina, volvió a demostrar que sus resultados de este año son un milagro. Recordemos que la mayor inversión del equipo de Simeone fue Javi Galán, por quien la dirección deportiva del Atleti de Andrea Berta pagó 5 millones de euros y que apenas juega. Hoy sí tuvo minutos… Savic volvió a desmostrar que lleva dos años a un nivel pésimo y Koke, a pesar de mejorar respecto al partido contra el Girona, llega hasta donde el físico le permite. Por su parte, Giménez cuajó un grandísimo partido, al igual que Rodrigo de Paul, pero no fue suficiente ante el avance de un Madrid que, con un desdibujado Vinicius (que fue sustituido) intentaba marcar el gol de la victoria ante un férreo Atleti. Ni Jude Bellingham estuvo inspirado en una noche que, para el Madrid, tampoco es para presumir más allá del resultado favorable. Cuando los penaltis asomaban en el horizonte, un error en el marcaje de salida de César Azpilicueta, una asistencia de Carvajal y un auto gol de Savic (todos defensas, de nuevo), cerraron un 4-3 con apenas cuatro minutos por delante. El último tanto fue una anécdota para reivindiciar el buen juego de Brahim Díaz, que sigue mereciendo más minutos. Oblak subió al área contraria para rematar el último córner y, en el rechace, Brahim fue más rápido y marcó el definitivo 5-3 a puerta vacía. En resumen, fue un partido eléctrico y espectacular para el espectador medio. Ni un segundo de pausa, ida y vuelta durante casi dos horas de show y goles por doquier. Sin embargo, los entrenadores confirmaron tras el partido que la igualdad fue máxima y el desastre de sus defensas también. El primer asalto lo gana el Madrid y espera rival para el domingo.
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