Barcelona se encierra previo al duelo de Copa ante Athletic

BARCELONA -- Señalado desde todos los ámbitos por la decisión de sus futbolistas de no acudir a la gala de la FIFA y en el ojo del huracán por la explosión de la polémica arbitral, el Barcelona vive las horas previas de su partido frente al Athletic de Bilbao con una presión evidente.

Luis Enrique respaldó públicamente la postura de sus jugadores respecto a faltar a la cita en Zúrich pero, a la vez, se posicionó de otra manera muy distinta en cuanto a la polémica arbitral, con un discurso en el que puso de manifiesto su contrariedad con las quejas de Piqué.

En esta situación enrevesada se sostiene el Barça, con la necesidad de remontar por primera vez bajo el mando del entrenador asturiano una eliminatoria de Copa y la conciencia de encontrarse en el momento más delicado de la temporada, con probablemente más frentes abiertos de los que nadie desearía alrededor del Camp Nou.

Iniesta, como capitán de la plantilla azulgrana, no solo se disculpó ante la FIFA a través de un vídeo que se demostró confeccionado deprisa y corriendo, sino que, de acuerdo a lo publicado por el diario Marca trasladó una disculpa directa a la plantilla del Real Madrid hablando según el reporte del medio español con Sergio Ramos.

AMBIENTE ENRARECIDO

Con todo lo sucedido, el partido frente al Athletic acude al escenario con absoluta urgencia. “Después de todo el espectáculo solo faltaría que Luis Enrique no pusiera al equipo titular” se ironizó en la sala de prensa azulgrana, donde se da por hecho que el entrenador alineará un once de gala con el objetivo claro de remontar la eliminatoria.

“Faltan al respeto al mundo del fútbol contando historias de manos negras y al final, cuando las cosas no van bien, aparece lo que realmente eres” disparó desde Bilbao Eneko Boveda, lateral del Athletic que descalificando las quejas de Piqué no hizo más que añadir pimienta a un encuentro que se espera bajo un ambiente especialmente caldeado.

Y que llegará conociéndose que el Comité Técnico de Árbitros presentó una denuncia contra el central del Barcelona por sus declaraciones quejándose de las actuaciones de los colegiados tanto en San Mamés como en El Madrigal.