|
BARCELONA -- El Barça vuelve a jugarse la Liga en 90 minutos sin vuelta atrás. La historia de cada jornada que se vivirá, otra vez, en el Camp Nou y frente al Athletic un día antes de que Sevilla y Real Madrid jueguen sus partidos. Con la duda de Iniesta y Busquets, que entrenaron con el resto de sus compañeros pero cuya reaparición podría considerarse apresurada a la vista de lo que viene, el campeón apura su puesta a punto, entendiendo la necesidad de mantener a todos los futbolistas preparados. Porque el Barça mira en tres frentes. Con la Liga en el primer plano y la incómoda visita del Athletic, con la Copa asomando el martes y el billete a la final prácticamente en la mano y con la Champions a la vuelta de la esquina, la semana siguiente, en el inicio de lo que se llama la hora de la verdad: las eliminatorias directas. “Si no hago rotaciones no llegamos al 15 de febrero”, proclamó en Madrid Luis Enrique tras la victoria de su equipo en el Calderón y esa sentencia del técnico asturiano es la que pone en el escenario la realidad de este Barcelona, que se encamina ya al momento determinante de la temporada: el momento en el que se juegan los títulos. El Athletic de Bilbao no gana en el Camp Nou desde el 24 de noviembre de 2001 y en Liga acumula 12 derrotas consecutivas, no habiendo puntuado desde la temporada 2003-04. Es un rival que se le suele dar bien al Barça en el estadio y, sin embargo, su visita siempre despierta reticencias. El equipo de Ernesto Valverde, entrenador que es tenido en cuenta en círculos azulgranas como candidato a suceder a Luis Enrique si el entrenador asturiano abandonase el banquillo del Barça, pelea por entrar en plazas de Europa League y acumula cinco jornadas sin perder. Mantiene, además, en el recuerdo el duelo copero de este mes de enero que para el Barça no fue en absoluto un paseo y que sirve de aviso en toda su extensión, provocando que el campeón deba regresar a los equilibrios en su alineación pensando en el futuro inmediato. Conociendo que Neymar no podrá jugar frente al Atlético después de la tarjeta que se le mostró en el partido copero disputado en el Vicente Calderón, la presencia del brasileño un día antes de su aniversario se entiende tan intocable como dudosa es la de otros jugadores imprescindibles. Al final, la lotería de la alineación, con la posible inclusión en la lista de Iniesta o Busquets, provocará que la decisión de Luis Enrique, en el que se contempla como el inicio de la hora de la verdad, esté en el primer plano.
|
