|
BARCELONA -- El vestuario del Barcelona ya hizo todo lo que podía por convencer a Neymar para que permanezca en el club azulgrana y, en boca de Gerard Piqué, le inquirió a explicarse públicamente. el central vino a reconocer abiertamente cuál es el deseo de la plantilla en rueda de prensa y lo verbalizó directamente Mascherano: “es el deseo grupal”. La rueda de prensa que ofrecieron los dos jugadores en Washington mostró la gravedad de la situación por sus semblantes serios. Porque el barcelonismo en pleno está pendiente del futuro del jugador brasileño. El central catalán, en cierta manera, quiso restarse trascendencia por la foto “que se hizo en un tono distendido” y admitiendo que sus sensaciones invitan a pensar en que “se quedará”, dejó muy claro que el asunto no es responsabilidad suya: “Quien tiene que decirlo es Ney. No me toca a mi anunciar nada”. Se sabe, en Washington, en Barcelona, París y Sao Paulo, que la situación de Neymar es capital alrededor del Barça. Así se entiende la presencia de su padre y de todos sus amigos acompañando en la gira. Y se comprende que ante el silencio oficial sea Gerard Piqué quien acuda al plano en su papel indiscutible de líder del club. En su discurso, calmado y se diría que muy estudiado, Piqué dividió lo que podrían ser los pensamientos de Neymar, dejando claro que no podría dudar por un asunto de dinero (algo muy discutible) o por irse a formar parte de un proyecto deportivo superior al Barcelona “porque no lo hay”… ¿Líder de un equipo?. Ahí las cosas deben verse de distinta forma. Piqué se refirió a sus charlas “como amigos. Yo intento exponerle la situación sabiendo que tiene opciones encima de la mesa y se intenta hacerle reflexionar”. ¿Y ese rol? “Podría llegarlo a entender porque aquí está Leo, pero si quisiera al final eso lo que le digo es que se piense el destino. No te vayas a París, a una Liga que no se ve tanto…”, sentenció el central catalán. UN NIÑO… Y MUCHAS DUDAS “Al final es un niño de 25 años”, solventó Piqué, sin abandonar junto a Mascherano esa imagen de seriedad y que, sin duda, es la que acompaña a todo el barcelonismo. Dudas, muchas, y nervios porque el club, oficialmente, no tiene intención de salir a la palestra a hablar por medio de ningún directivo ni del presidente. “El club ya ha dicho todo lo que tenía que decir”, repitió a ESPN una fuente del propio Barcelona, que espera, sigue esperando, a que Neymar de ese paso adelante. El vestuario, lo repitió Piqué y se sumó Mascherano, ha trabajado intensamente los últimos días para hacerle cambiar de idea y se diría ha dejado en manos del club, de los ejecutivos y directivos, el camino a seguir. Bartomeu, que volvió mudo a Barcelona, dejó en manos de Raúl Sanllehí la dirección oficial de las discusiones y espera que antes del Clásico frente al Real Madrid se pueda solventar todo. El viernes Neymar debe asistir a un acto promocional de Nike y se entiende que entonces podría el jugador brasileño cerrar el asunto. Eso, al menos, es lo que se espera. Pero el Barça, todo, sigue en ascuas.
|
